Una maldita gripe me ha tenido bastante fastidiado durante esta semana y en los escasos momentos de lucidez personal he podido contemplar dos grandes documentales como ‘Sound City' de Dave Grohl (el ‘post' anterior está dedicado a esta preciosa creación) y ‘A film about kids and music', otra gran muestra del género en el ámbito musical con Ramon Tort como director.
En este caso, cualquier melómano y ser humano con cierta sensibilidad acabará sumamente emocionado tras prestar atención al trabajo de Joan Chamorro con su colosal método de enseñanza en la Sant Andreu Jazz Band. Aquí, jóvenes de 6 a 18 años muestran un talento descomunal para hacer jazz clásico con mucho swing gracias a su predisposición personal, la increíble facilidad de los niños para aprender y la capacidad de Chamorro en el campo didáctico. ‘A film about kids and music' nos recuerda las posibilidades musicales en el mundo de la educación y el fascinante resultado del trabajo bien hecho. ¡Bravo!
Con ‘Sound City' estamos ante un maravilloso documental de Dave Grohl sobre el legendario estudio de grabación situado en Los Ángeles, que cerró en 2011 tras 32 años de intensa vida. Esta película, que ya está disponible en Internet, cuenta la historia de los estudios Sound City a través de sus protagonistas. Por un lado, los dueños y trabajadores de aquel emblemático lugar. Por el otro, los músicos que dejaron huella, grabando verdaderos discazos. De hecho, su director estuvo allí con Nirvana para grabar ‘Nevermind' en 1991.
El documental es fantástico por tres razones: el recorrido histórico que hace, los detalles técnicos que desprende para comprender la supremacía de lo analógico y cómo manifiesta la importancia del estudio como espacio de encuentro, de convivencia entre artistas.
Dotados de un ambiente muy familiar y especialmente deseados por el sonido de las baterías, los estudios Sound City comenzaron a adquirir una gran popularidad cuando adquirieron la mesa de mezclas Neve 8028 (Grohl la compró para su Estudio 606) y Neil Young sería uno de los primero inquilinos con aquel ‘After the gold rush'. No obstante, el primer gran ‘pelotazo' fue el disco homónimo de Fleetwood Mac (1975), cuando Stevie Nicks y Lindsey Buckinghman (guitarra) se unieron a la banda.
En los 70 pasaron por allí Elton John o Tom Petty. Durante los 80, Rick Springfield, Santana, Barry Manilow o Dio. Ya en los 90, Nirvana, Rage Against the Machine, Black Crowes, Red Hot, Queens of Stone Age, Carl Perkins, Johny Cash, Metallica o los Artic Monkeys (‘Suck it and see', 2011). La banda sonora también es una gozada e incluye ‘joyitas' grabadas por Grohl con la mítica Neve 8028 en su Studio 606 como la colaboración de Paul McCartney, el ídolo del líder de Foo Fighters, en ‘Cut me some slack'. Un visionado imprescindible.
Descubrí a Bruce Springsteen en aquel concierto de 2003 que ofreció en Barcelona, incitado por un amigo que le idolatraba. Casi acaba conmigo. Seguir sus directos es como hacer maratones. Te rompe los huesos, los músculos y la garganta a base de cambios de ritmo. Primero, golpea. Luego, acaricia. Desde entonces, le ubico entre los grandes y si te parezco exagerado, vete a ver un concierto suyo. Caes a sus pies, sino te caes ante por desfallecimiento físico. Han pasado ocho años y sigue haciendo lo mismo, con 61 veranos a sus espaldas. Increíble.
Mi fascinación por Springsteen ha aumentado todavía más después de ver el documental 'The Promise', que cuenta el proceso de creación y grabación de 'Darkness on the edge of town'. Aquel disco, cuarto de estudio en su trayectoria profesional, salió en 1978 y colocó al jefe, merecido mote, en el olimpo de los grandes músicos. Daba igual lo que hiciese a posteriori. Ser capaz de igualar o mejorar 'Born to Run' (1975) sólo está al alcance de unos pocos. No me refiero únicamente a cuestiones técnicas, instrumentales o vocales, pienso incluso más en cómo siente y cómo transmite mediante canciones lo que llevaba dentro en aquel momento determinado, en ese año o en aquella hora concreta.
Frases como "las vidas están en la línea en la que los sueños se encuentran y se pierden" (Darkness of the edge of town) ilustran el esfuerzo de un ser humano tan semejante a nosotros por superarse, por enfrentarse a lo que le rodea para esquivar los límites que nos atemorizan. Bruce Springsteen es un alimento recomendable para mirarse al espejo, reconocerse y seguir adelante.
Veamos. Un joven melómano se acerca a una tienda de discos y encuentra el 'Amazing Journey' de The Who en una estantería al módico precio de nueve euros. ¿Qué hace? Comprarlo. Este doble DVD supone un contacto tan íntimo con esta banda londinense, una de las que más ha aportado a la historia del rock&roll, que acabas estupefacto cuando finaliza el primer compacto.El documental, dirigido por Paul Crowder y Murray Lerner, ofrece un tratamiento audiovisual muy cercano a los espectadores. Éstos viajan en el tiempo a través de casi medio siglo con la banda sonora que compuso un cuarteto sonoro inmejorable: Roger Daltrey (voz), Pete Townshend (guitarra), John Entwistle (bajo) y Keith Moon (batería).
'Amazing Journey' comienza con el encuentro de aquellos cuatro jóvenes a los que les unía un gran pasión por la música y una química espectacular sobre el escenario, aunque sus personalidades no tenían nada que ver, por lo que fueron encajando poco a poco en una dinámica tan intensa que este epíteto pide un tono más superlativo. Poco a poco, el documental desarrolla la historia de un grupo cuya primera piedra de toque fue 'I can't explain' y que a mediados de los 60 ya mostraba temazos como 'My Generation'.
Durante la citada década y los 70, The Who se convirtió, de forma progresiva, en un grupo fundamental en la sociedad de aquel tiempo. Aquella forma tan especial que tenían de tocar, el talento compositivo de Pete, sus habilidades instrumentales y el protagonismo vocal de Roger (sobre todo cuando se encontró con el personaje de 'Tommy') otorgan a The Who un valor único en el panorama musical. La creación de discos como 'Who´s next' o 'Quadrophenia', al igual que los restantes álbumes de su discografía, ejemplifican la magia artística de estos tíos.
'Amazing Journey' no sólo transmite los motivos que les llevaron a ser grandes, sino las dudas o tantas elecciones constantes realizadas durante la vida the Twho. También exhibe esas crisis que atraviesa cualquier proyecto en las voces de Pete, Roger y numerosas personas vinculadas a su trayectoria. Todos tipo de sentimientos aparecen durante 'Amazing Journey', que narra con una humanidad tremenda el fallecimiento, primero, de Keit en 1978 y, después, de John hace ocho años. El adiós de Moon supuso el principio del fin para un grupo que, aunque no desapareció por aquel entonces, perdió una pata insustituible de esta mesa. Cuando falten los cuerpos, nos quedarán sus almas.
Alejandro Sanz fue el protagonista de un programa especial (ver vídeo) emitido el pasado lunes 21 en TVE. Durante el desarrollo de 'Paraísos', los espectadores pudieron ver parte de los recientes conciertos realizados por el artista en Madrid y sus charlas con Ana Pastor, Casillas, Dani Martin o Maribel Verdú. Esta especie de documental, cuyo duración se alargó hasta los 74 minutos, fue una buena oportunidad para conocer más de cerca a Sanz a través de preguntas, anécdotas y pensamientos en voz alta. En definitiva, el lado más humano del cantante. Eso sí, también hubo música. Mucha música.
Nunca he sido un gran seguidor de los videoclips ni de los documentales sobre grupos de música. Debido a un regalo, ha caído en mis manos 'Lord dont´s slow me down', un documental dirigido por Baillie Walsh sobre Oasis. Todavía no lo he acabado, pero tiene sustancia.
Esto es algo así como el trailer del documental, que realiza un seguimiento a los hermanos Gallagher y su séquito durante la gira mundial de 2005, cuando andaban presentando el álbum 'Don´t believe the truth'. La obra audiovisual creada por Walsh transmite con una gran trasparencia las personalidades de Liam y Noel a través de viajes, backstages, entrevistas y actitudes durante los conciertos.
Vigués. Gallego. Periodista 'todoterreno'. Entusiasta de la vida. Melómano. Loco del deporte. Celtista. Enérgico. Radiofónico. Así es Marcos Blanco, periodista que actualmente colabora en el Grupo de Comunicación Gente con este blog, que nació un 19 de noviembre de 2008 con un 'post' sobre Jamie Cullum.
Esta web ha funcionado durante todo este tiempo como una banda sonora diaria, repleta de canciones que nos hacen amar la vida. Recuerdos, descubrimientos, opiniones, novedades, entrevistas o crónicas de conciertos han formado parte de 'Melómanos' y seguimos en la brecha: