Lo subieron a Internet el 20 de septiembre y tiene casi 8.000 visitas. Múltiples parabienes en diferentes medios de comunicación y piropos en las diferentes redes sociales recaen sobre el videoclip de 'Mentiras', segundo single del primer disco de Dinero. ¡Una gozada!
Mientras uno tira del inodoro, nacen ideas. Esto es lo que le sucedió a Titán Pozo en su casa, el día después de estar con Dinero en el concierto que la banda ofreció en Rock in Rio Madrid 2010. El grupo andaba detrás de Pozo para que firmase su segundo videoclip, después de 'En Invierno', y una simpática anécdota con Sean queriendo meter una botella con el culo en un recipiente de basura le hizo pensar en la golfa situación, de máximo riesgo que podría hacerse para la solicitada creación.
Entonces, Pozo ideó enterrar bajo tierra a Sean en una playa y jugar con la tensión de la marea, que poco a poco le iría ahogando. Buscaron playas, estudiaron mareas y encontraron un lugar propicio en Portugal donde utilizaron los efectos de la madre naturaleza para desarrollar esta maravilla: el videoclip de 'Mentiras'. No tiene desperdicio. ¡Enhorabuena por un trabajo tan creativo!
Después de su actuación en el Escenario Sunset de Rock in Rio Madrid, los Dinero recibieron a este melómano en su camerino con esa naturalidad y diversión que les caracteriza. Mantuvimos una de esas charlas que podríamos tener con tus amigos en el bar de siempre...
Jaleo, mucho jaleo. Cuando uno acude a Rock in Rio Madrid tiene que llevar las pilas corporales y mentales bien cargadas para disfrutar de todo lo que ofrece la Ciudad del Rock. Un poco de cotilleo por los 'stands', alguna atracción y, sobre todo, mucha música. "Vamos a la salida de emergencia", gritaba riéndose un asistente con su grupo de amigos después de observar los paneles informativos del recinto. Hace falta. Un mapa, las ideas claras, mucho dinamismo en las piernas y los cinco sentidos bien encendidos oídos bien encendidos son recursos fundamentales para sacarle el máximo rendimiento a la entrada, que también cuesta lo suyo.
A las siete de la tarde, el servicio de autobuses funcionaba de forma ágil en los aledaños del Santiago Bernabéu, uno de puntos de transporte hasta Arganda del Rey. "¡Jefe, hace mucho calor aquí! Ponga el aire acondicionado", bromeaban desde los asientos. El aspecto desenfadado de quienes se sentaban a mi lado tenía mucho que ver con el cartel. Con cada estilo, su imagen. Como no, el personal hacía tiempo en la entrada de Rock in Rio Madrid tomándose unos refrigerios y lo que hiciera falta. Una vez dentro, los chicos de Dinero daban mucha caña en el Escenario Sunset. ¡Se salieron!
Al mismo tiempo, Draco exprimía el sonido del Escenario Mundo. Hay que medir bien los tiempos en la Ciudad del Rock porque si tienes prisa en ir de un lado a otro lo llevas claro. Luz y color no faltan en este inmenso espacio, donde sobresale una onírica noria. Rock in Rio ofrece algo diferente a lo que tenemos en España si pensamos en el concepto de festival porque la vertiente publicitaria con los 'stands' y sus acciones, ya sean karaokes, regalos o atractivos audiovisuales para el público, ha sido innovadora en nuestro país. Critiquen lo que quieran, pero si vienen miles de personas, que corren de acá para allá, con sus cervezas, pizzas, sentados en amenas conversaciones o haciendo cola para cualquier actividad eso implica la aparición de un 'algo' necesario. La moda y esa zona destinada a los niños le dan más atractivo a este parque de atracciones con banda sonora. ¡Ah! La música. En este blog, hablamos de música y este grupo de espectadores me llamó mucho la atención durante su magistral interpretación de 'Años 80' un tema de Los Piratas, en una divertida propuesta publicitaria. Perdonen la indiscrección, pero el vídeo hay que colgarlo...
O' Funk'illo y The Rumblers, interesante combinación, fueron el segundo plato del Sunset, para deleite de la gente, entregada ante el escenario. De hecho, se estiraron más de la cuenta en el espectáculo. Así da gusto. No como los Cypress Hill, adorados por quien escribe, que apenas estuvieron cuarenta y cinco minutos, si tenemos en cuenta el horario de comienzo, sobre el Escenario Mundo. "Han estado muy divertidos", comentan en las primeras filas, pendientes de pillar un buen sitio para ver a Rage Against the Machine.
La lluvia hizo acto de aparición durante un buen rato, anécdota desagrable cuando estás al aire libre, pero prontó remitió. "¡Vamos, vamos, que no llegamos!", le grita una amiga a otra. A saber a dónde se dirigen. Con la llegada de la noche, el cielo de Arganda presenta un aspecto mágico con la iluminación de Rock in Rio Madrid. La Electrónica se llena de personas con ganas de buenos sonidos y nos trasladamos al siglo XXII con un montaje llamativo. Los Jane´s Adicction lo dan todo en el Escenario Mundo y la sobredosis de rock sienta muy bien. Como decíamos ayer, rock, funk, rap y metal forman una grata combinación para el cuarto día del festival. Y todavía falta el gran momento del día: Rage Against the Machine. La rabia siempre triunfa sobre la máquina. No lo olviden. ¡Mañana contamos la vibrante experiencia de estar ante los RATM! Sean buenos. Y felices.
Rock in Rio Madrid regresa este viernes 11 de junio con la cuarta jornada del festival, uno de los más importantes del mundo por la repercusión mediática de las actuaciones y las opciones de entretenimiento que ofrece. Alrededor de 50.000 personas han acudido cada día durante las tres jornadas anteriores para ver a Bon Jovi, Shakira o Myley Cyrus en la Ciudad del Rock (Arganda del Rey). El cuarto día ofrece un cartel más que interesante y trae consigo una vibrante combinación de rock, rap, metal y funk.
Entre medias, Draco (20:00 horas) abrirá la sesión en el Escenario Mundo, donde habrá mucha energía y sonidos revolucionarios. De seguido, los Cypress Hill (21:15), una institución en la cultura hip-hop con procedencia californiana y reminiscencias latinas. Dos décadas haciendo himnos como 'Insane in the brain' o 'Hits from the bong' les avalan. Será un auténtico placer verles de cerca...
Desde California, también llega el legendario rock alternativo de los Jane´s Addiction 22:45) con Perry Farell a la cabeza, que precederán a la actuación más esperada de la noche: Rage against the machine (12:30). Rabia contra la máquina sobre el Escenario Mundo de Rock in Rio. Zack de la Rocha y Tom Morello lideran a este mítica banda que causó sensación durante los 90 con una sabrosa combinación de funk, metal, rock y rap. Arrasaron con aquel disco homónimo en 1992 donde estaba 'Killing in the Name' y han creado grandes discos como ‘Evil Empire' o ‘The Battle Of Los Angeles'. Será su única actuación en España y la ocasión perfecta para saber qué ha quedado de aquella época. Seguramente, miles de personas se pondrán a botar cuando suene esto...
Tampoco podemos olvidarnos de la Electrónica, una gigante pista multicolor en la que estarán con Dj´s de lujo. La sesión comenzará a las 21:30 horas y se cerrará con la presencia de Wally López (01:15) y Axwell (04:30). Entre ambos, uno de los grandes de las pistas de bailes manejará su mesa de mezclas sobre el escenario más grande del festival: Tiësto (02:45).
Mañana estaremos en Rock in Rio Madrid para informaros sobre lo que suceda allí, centrándonos en los conciertos, el ambiente y las anécdotas que se sucedan a lo largo de la jornada. ¡Yo voy! ¿Y tú?
Espero que sólo sea una mala racha o el fruto de varias casualidades consecutivas, porque atisbo cierta tendencia al retraso, a la impuntualidad y desorden horario en los eventos musicales. Queridos programadores y artistas, el tiempo es oro. Para todos.
El pasado viernes acudí al concierto de Niño y Pistola en la sala La Iguana Club de Vigo. Según el MySpace del grupo, la hora prevista para el espectáculo eran las once de la noche. Según el Faro de Vigo, la cita comenzaba a las doce. La sesión arrancó tarde con Aerostato, los teloneros, y la banda principal se puso a tocar pasada la una de la madrugada. Un día antes, sucedió lo mismo en el Teatro Lara (Madrid) con el evento de Amparo Sánchez. Su web y diferentes páginas en Internet advertían que a las 22 horas tendría lugar la cita. Nada más llegar al teatro, supe que hasta las 22:30 estaría de brazos cruzados. Esto también me ha pasado en el concierto que los Dinero ofrecieron en la sala El Sol (Madrid), en el eterno retraso de los L.A. dentro de la sala Caracol (casi una hora) o antes del último conciertazo que dieron los Matiné en La Boca del Lobo. La música sonó 45 minutos después de la hora prevista. Demasiados ejemplos, casi todos recientes, para argumentar una fea costumbre.
Así como las funciones en las salas de cine tienen una hora de comienzo, los espectáculos teatrales actúan de la misma manera y los museos suelen ser rigurosos en este aspecto, la música tiene que comportarse de forma educada, quitándose algunas etiquetas relacionadas con el orden desordenado frecuente en sus modos profesionales. ¿A quién corresponde la culpa de estos errores? Exceptuando los conciertos masivos, para los que hace falta pagar un pastón en una entrada, o esos realizados en grandes aforos (estadios, pabellones, recintos emblemáticos), la puntualidad brilla por su ausencia, así como la coordinación de las diferentes informaciones relacionadas con los horarios.
Evidentemente, cuando uno acude por la noche a un recinto para ver a su artista favorito, no le otorga demasiada trascendencia a este asunto. Si vas acompañado de muchos amigos, las charlas y el consumo en la barra (motivo que puede propiciar estos retrasos) amenizan la espera, pero quienes frecuentan las salas de conciertos no deberían escapar a la análisis. Los fines de semana o vísperas de festivos, tampoco fastidia, pero entre semana el personal tiene el tiempo calculado para madrugar al día siguiente. Al y al cabo, el tiempo es oro, un bien valioso, para todos, además del respeto que envuelve a toda esta reflexión.
Entiendo que mi queja no es una pataleta, sino un derecho, ya pagues el importe del espectáculo o acudas como informador a cubrir el susodicho evento. Un poco de orden en este sentido ayudaría a mejorar la imagen de la música, que ya tiene muchos sambenitos a su alrededor como para añadirle uno más.
El dinero hace mucha falta y su música también. Sean Marholm (voz, guitarra), Rubén Giménez (bajo) y Ekain Olorza (batería) han creado Dinero, una formación música que ha cautivado a público y crítica con el primer trabajo discográfico del trío. Una charla con ellos da para mucho.
El disco salió en noviembre del 2009. ¿Qué sensaciones tenéis con la promoción y la respuesta del público desde entonces?
Sean: Desde entonces, esto es una montaña rusa. Todo va muy bien, no hemos parado de tocar, hemos tenido una gira de presentación que a más de un grupo le gustaría haber tenido con su primer disco y la respuesta ha sido muy buena. Sabes que la acogida puede ser un poco fría porque viajas por España y no sabes lo que le vas a encontrar. Por lo menos, estamos teniendo a esas 15, 20 o 30 personas desconocidas que vienen a vernos, además de la gente conocida, que acaba encantada. Eso te da muchas ganas de seguir. La 'promo', el vídeo, todo va bien y la discográfica se está portando con nosotros. La verdad es que somos una pequeña familia. Estamos todos a una.
¿Ha costado mucho sacar este disco?
Sean: Ha costado mucho llegar al momento de grabar el disco.
Ekain: Hemos trabajado mucho para esto. Nos juntamos en junio del 2007 y desde el primer momento han sido ensayos casi diarios, componiendo un montón, con el objetivo del disco pero sin ninguna fecha establecida.
Sean: Tenemos experiencia de otras bandas. Antes de poner el anuncio y que entrase Ekain en la banda para que se formase Dinero, el bajista y yo habíamos venido a Madrid medio año antes, buscándonos la vida, intentando tocar y sacar adelante el grupo. A Ekain le ha pasado tres cuartos de lo mismo como baterista. Entonces, cuando nos juntamos cada uno tenía su bagaje, sabíamos cómo funcionaban las cosas y que lo importante era trabajar, conocernos como banda, hacer muchas canciones y mucho trabajo de local, más que salir a tocar fuera. Realmente, antes del disco, sólo hemos salido para concursos y conciertos ocasionales. Poco a poco íbamos teniendo bastante canciones, ganamos el concurso del Astoria, fuimos a tocar al Sonorama y la gente respondió muy bien. Entonces, hubo un punto de inflexión. Con 50 canciones en dos años y pico de local, dijimos "ya es el momento de grabar un disco. Somos mejores músicos y estamos preparados".
'El momento perfecto', canción que abre el álbum, durante 'Los conciertos de Radio 3'
¿De qué manera surgió Dinero? ¿Cómo os conocísteis? Sean y Rubén llegan a Madrid desde Alicante a Madrid. Ekain desde el País Vasco...
Ekain: Yo vengo de un pueblo vizcaíno que se llama Berriz. De casualidad llegamos a la vez en 2006, pero hasta que no leí el anuncio de que estaban buscando batería...
Sean: Pusimos un anuncio en Internet y Ekain fue el primero que llamó, el mismo día hicimos una prueba y ya está.
Ekain: He llamado a dos anuncios de esos en mi vida. El primero fue un 'chasco' y dije "no voy a hacer esto nunca más". Estaba aburrido en el local, me metí en Internet y no sé porqué llamé. Supongo que por las influencias y mira donde estamos.
Roberto Chopi
¿Cómo fueron las primeras pruebas?
Sean: Pues no sé si él nos estaba probando a nosotros o nosotros a él. Creo que lo más difícil en una banda es llegar al punto al que hemos llegado nosotros tres. Cada uno tiene exactamente la misma importancia que los otros y es todo una democracia. Aparte, compartimos mucho a nivel personal, de amistad y de todo. Esto es muy importante para que las bandas sean de verdad o se llegue a poder aguantar y sufrir juntos sin que salga nadie disparado.
Ekain: Es un poco como lo que pasa con las parejas. Las primeras veces hay un poco de locura y luego todo se va calmando, te vas conociendo y vas viendo la realidad.
Sean: Básicamente, echamos un par de polvos en los dos primeros ensayos, fue todo muy bonito y luego nos pusimos a 'currar' (risas). Rubén y yo, que veníamos con un proyecto medio hecho de Alicante, casi hicimos borrón y cuenta nueva. Nos juntamos tres músicos muy enérgicos, encajábamos muy bien. De hecho, el planteamiento de trío no estaba del todo claro, pero cuando llegó Ekain y nos pusimos a tocar vimos que no hacía falta nada más. Entonces, dijimos "vamos a trabajar, a ver lo que le sale, a tantear a la gente para ver cómo es la respuesta" y así fue.
¿Qué aporta cada componente tanto en lo personal como musicalmente?
Ekain: Cada uno somos un mundo.
Sean: Bueno, creo que Rubén, como bajista, aporta la actitud y es el corazón. La mala leche. Sus coros son muy potentes y me apoyan mucho en las voces principales. Ekain es el mejor músico de la banda, el esqueleto, el motor, el que nos tiene atados en corto a los dos, que no somos tan buenos músicos.
Ekain: No (risas), la verdad es que son muy buenos músicos. Técnicamente, igual no tanto, pero sí lo son. Conozco a gente que es mucho mejor técnicamente pero son peores músicos. Es muy diferente ser instrumentista o ser músico.
Sean: Cada uno tiene su parte. Ekain aporta sensatez y participa más en cuanto a la estructuración de las canciones, aunque la semilla creativa o melódica la suela poner yo. Sin el sentido común de Ekain y el corazón o el 'power' de Rubén, esto no tendría sentido. También discutimos muchísimo, pero son cosas normales.
Ekain: Son como las discusiones al acabar un disco. Las dos últimas semanas de grabación siempre hay discusiones, pero con el tiempo te pones el disco y te olvidas.
Sean: Lo bueno es la libertad que nos dimos desde el primer momento. Dijimos que cada uno podía opinar libremente sobre los arreglos de cualquier de los otros.
Ekain: Igual alguno es más reticente a la hora de ceder en algunas partes, pero al final todos nos damos cuenta de si las cosas están bien o mal. Es la suerte que hemos tenido de poder tomarnos las cosas con calma, tanto la composición como la grabación.
En cuanto al sonido, ¿estábais todos en la misma línea o cada uno ha aportado lo suyo?
Ekain: Tenemos muchos grupos en común. Luego, cada uno tira para un lado u otro, pero los tres somos ‘noventeros' a muerte.
Sean: Creo que la fórmula de Dinero tiene una parte de casualidad, con tres personas que somos muy enérgicas tocando. Eso el reflejo de las cosas en las que coincidimos. Después, hay una parte más consciente, pero la fórmula salió bastante sola. Vimos que nos podíamos a tocar y salía una mezcla de nostalgia ‘noventera', de rock alternativo de los 90.
Ekain: No está muy pensado. Somos los tres haciendo lo que nos sale.
Sean: El rock alternativo de los últimos 20 años, ya sea la onda más 'garajera' y bailable de los 2000 o el rock alternativo de los 90 sin tampoco ceñirnos demasiado. Lo que teníamos claro es que con 10 o 20 segundos de cualquier momento del disco la gente entendiese perfectamente cual era nuestra propuesta. Cualquier tema que era un poco especial o se acercaba a ciertos extremos, se quedó fuera por eso. Queríamos que el primer disco simbolizase desde la primera hasta la última canción lo que es el concepto de Dinero. Las referencias son casi todas anglosajonas, pero el hecho de hacerlo en castellano ofrece un punto original. En vez de intentar imitar a los de fuera, hemos traído el sonido hasta aquí y lo hemos nacionalizado un poco. Estamos a medio camino entre el mundo independiente y el del rock más purista. Por eso, pensamos que estamos llenando un vacío al que no se le ha hecho caso antes.
Videoclip de 'En invierno'
El disco incluye piezas muy pegadizas como 'En invierno', el primer single del álbum. ¿Cómo surgió esta gran canción?
Ekain: Pues es una canción que hicimos a los cuatro meses. La grabamos en diciembre. Ha evolucionado bastante desde el prototipo que grabamos en Berriz. Salió en la primera etapa. Teníamos nueve temas en las dos primeras 'demos' y ahí están 'El momento perfecto' y 'En invierno'.
Sean: Creo que fuimos encontrado la confluencia perfecta entre el rock y la música bailable. 'En invierno' es de las canciones más bailables y nos gusta también el enfoque del mensaje positivo, alegre. Algo que no suele ocurrir en la música independiente, donde todo es más retorcido y retórico.
Ekain: La verdad es que nos costó bastante elegir el single. Piensa que son 50 canciones compuestas durante un año. Ya es bastante 'jodido' elegir 10 de esas 50 como para encima elegir una que sea utilize como videoclip y que te represente en todas partes. Dudábamos entre tres o cuatro canciones.
Sean: 'En invierno' Igual no es el tema más cañero del disco, pero el siguiente single representará el lado más rockero de Dinero: 'Mentiras' (ya han grabado el videoclip). Estábamos entre 'Mentiras' y 'Trastorno Bipolar'. En el videoclip de 'En invierno' parecemos unos macarras empedernidos que cantan una una canción bonita, alegre y feliz.
¿Qué significado tienen las letras en Dinero?
Sean: Van un poco de la mano con el concepto de lo que se espera de cualquier banda que salga hoy en día. Musicalmente, en las letras nos hemos fijado que gran parte de las bandas que gustan cantando en inglés, de fuera o de aquí, tienen letras muy directas y sencillas. Son un apoyo para la música, en lugar de ser protagonistas de los temas. Aquí en España, si cantas en inglés la gente no se fija en las letras, pero en el momento en que alguien hace unas letras, sencillas, coloquiales o cercanas, parece que está haciendo una mala letra. Parece que una canción tiene que ser demasiado retorcida o que no tienes que entender de qué está hablando, aún sonando muy poética, para que se convierte en buena.
Ekain: No hay más que escuchar ese tema de The Police que dice 'De Do Do Do, De Da Da Da'. ¿Quién coño se ha preguntado si esa letra es buena o mala?
Sean: Entonces, hemos pensado eso. Ya que lo más importante de Dinero es la música, la melodía, la carga energética, que las letras fuesen sencillas, directas, fácilmente asimilables y pensando en el directo. Que pudiera venir una persona que no nos conoce y que en el momento de escuchar la canción ya tenga una sensación completa de energía, música, letra, todo muy unido. No somos poetas ni literatos. Reivindicamos la sencillez, sin pecar de cutre, banal o música. Sí que es verdad que hablamos de una generación que es la nuestra. Ekain y yo tenemos 26. Rubén, un par de años más. Hablamos de nuestras experiencias y lo que queda es el amor, el desamor, la fiesta, los cabreos, eso de arreglar el mundo a las cuatro de la mañana medio borracho y vivencias así.
Roberto Chopi
Por último, es justo y necesario tratar el asunto de los conciertos. El álbum tiene una sensación brutal de directo. Invita a veros. ¿Cómo os comportáis sobre el escenario?
Sean: Nosotros no pensamos que un directo es sólo que subirse al escenario y tocar unas canciones, pero tampoco queremos adornarlas con artificios ni con una escenografía que no sea sencilla. Los subimos los tres al escenario y lo damos todo, sudamos la gota gorda.
Ekain: Nos da igual la cantidad de público que haya. Por ejemplo, en los tres conciertos que hicimos del Astoria había muy poca gente y lo ganamos tocando para 10 o 15 personas por directo.
Sean: Las canciones están pensadas para el directo y en el momento que tienes un poco de respuesta hay una conexión tremenda. Incluso, apoyamos que la gente se baje ilegalmente el disco, que lo escuche en cualquiera de nuestras páginas, pero que viva la experiencia del directo antes de decir si le gustamos o no. En concierto es donde pensamos que somos buenos de verdad.
¿Cuál es la canción que te persigue últimamente? ¡Esa melodía o ese estribillo que uno suelta en situaciones tan insospechadas como el cuarto de baño o un paso de cebra? 'En Invierno', una de las canciones que forma parte del debut discográfico de Dinero, me excita sin medida. A medio camino entre el rock y el disco, reincido constantemente en esta pieza, incluida en el primer álbum de Sean Marholm (guitarra y voz), Rubén Giménez (bajo) y Ekain Elorza (batería). Los dos primeros se movieron de Alicante a Madrid hace tres años. Entonces, conocieron a Ekain. Los tres iniciaron su aventura musical en junio de 2007 y han pasado más de dos años para que pudiesen grabar el citado disco, una auténtica pasada electrificada compuesta por 11 temas, cada cual más hipnótico.
Este 'power trío' lleva unos cuantos meses dando vueltas por España para dar a conocer el disco y tienen fechas en Toledo, Vizcaya, Murcia, Almeria y Madrid. Decía aquel famoso anuncio de neumáticos que la potencia sin control no sirve de nada. Dinero aúna los dos conceptos. Su sonido visceral camina por un sendero consistente, equilibrado. ¡Dinero!
Hay que vivir en un burbuja piscotrópica o tener una cuenta corriente repleta de ceros para mantener la compostura piscológica entre tanta crisis. Bueno, otras opciones son apagar la televisión cuando aparecen las noticias, no leer los periódicos u obviar cualquier pregunta sobre el 'curro' a la hora de conversar con la 'people'. De forma directa o indirecta, a uno tiene que tocarle la fibra sensible tanta dolorosa realidad. ¿Un estado mental? ¡Cómo se atreven! Bancos, empresarios, políticos... Sinvergüenzas. Zoquetes. Lo que quieran. Sin embargo, muchos individuos han hipotecado sus pasos sin perspectiva, con la acumulación de bienes, con esa seguridad materialista como objetivo. Dinero. Maldito dinero. Monedas, billetes, un plato apetitoso para nublar conciencias. La asquerosa caja registradora...
"Money, just get away", dice Roger Waters. Aléjate y deja de machacarme. La mitad de las cosas que tenemos nos sobran. También se acumulan en cajones o buhardillas. Nos han jodido, sí, porque "money makes the world go around, the world go around". ¿Verdad, Liza? Compensa los impulsos, mata las frustraciones, te hace sentirse mejor de lo que eres, llegar a donde quieras, escuchar lo que quieres escuchar...
Unos optan por tomarse el día a día como si fuese el último. Otros prefieren mirar hacia el futuro, invertir en sus ilusiones. Deseos. Hasta el punto de fagocitar el presente simple o el presente continuo. A mí me compensa el equilibrio, hasta el momento compuesto por tres nociones: sólo los más fuertes sobreviven (la evolución de Darwin en estado puro), la crudeza actual destruye castillos de naipes innecesarios y sólo el dolor de los nuestros, así como nuestra muerte, es una barrera infranqueable. Si optan por convertirse en protagonistas de una película de aventuras, tengan cuidado. Mientras tanto, la música siempre nos hará libres...
Publicado el 13 de febrero de 2009 a las 13:30.
Marcos Blanco
Vigués. Gallego. Periodista 'todoterreno'. Entusiasta de la vida. Melómano. Loco del deporte. Celtista. Enérgico. Radiofónico. Así es Marcos Blanco, periodista que actualmente colabora en el Grupo de Comunicación Gente con este blog, que nació un 19 de noviembre de 2008 con un 'post' sobre Jamie Cullum.
Esta web ha funcionado durante todo este tiempo como una banda sonora diaria, repleta de canciones que nos hacen amar la vida. Recuerdos, descubrimientos, opiniones, novedades, entrevistas o crónicas de conciertos han formado parte de 'Melómanos' y seguimos en la brecha:
