Melómanos

Los Amigos Invisibles vienen a por todas. Del 9 al 17 de abril recorrerán España para dar a conocer su calidad artística y a una banda que comenzó bajo este divertido nombre a mediados de los 90 en su Venezuela natal. Barcelona, Madrid, Vigo, La Coruña, Tenerife o Valencia podrán ver en directo las evoluciones de Julio Briceño, José Luis Pardo, José Rafael Torres, Armando Figueredo, Juan Manuel Roura y Mauricio Arcas.

El sexteto de Caracas nació como el primer grupo de 'dance' de su tierra, caracterizada desde siempre por la salsa o el merengue y con una marcada vena rockera durante las últimas dos décadas. Con la reciente publicación de 'Comercial', su último trabajo discográfico, pretenden darse a conocer en nuestro país y darle una alegría a toda esa gente que les ha ido descubriendo poco a poco durante sus quince años de vida. Además, el reciente Grammy Latino obtenido por la banda les ha dado un pequeño impulso internacional más que merecido.

Cuentan Los Amigos Invisibles que, cuando todavía no les conocía nadie, se fueron a New York con 20 discos bajo el brazo, consiguieron un par de actuaciones y el insigne David Byrne compró uno de aquellos CD´s que incluían las canciones de 'A Typical And Autoctonal Venezuelan Dance Band' (EMI, 1995). "El atractivo de Los Amigos Invisibles reside en su calidad, la cual es realmente global... Cuando se escucha a Los Amigos Invisibles, uno se da cuenta de que ellos entienden lo que está pasando en el mundo de la música", ha comentado el fundador de Talking Heads.

Lo cierto es que la banda venezolana aporta al panorama musical una fresca combinación de sonidos funk, acid-jazz, disco y pachanga caribeña. 'Arepa 3000' fascina a esos oídos ávidos de ritmo con piezas pegadizas como 'Mujer Policía'. 'Comercial' tampoco escapa a la tendencia habitual de Los Amigos Invisibles. El nombre no tiene trampa ni cartón. Según Briceño, vocalista del grupo, se llama así porque las canciones son muy pegadizas y también porque hacen referencia a la música de los anuncios de publicidad.

 

 

 

Publicado el 5 de abril de 2010 a las 10:15.

               

Aquel 14 de enero de 2002, Chenoa conquistó mi corazón con su interpretación del 'Last Dance' de Donna Sumer. Dejando a un lado ese conjunto fabuloso que llevaba puesto y la sensualidad que siempre me ha transmitido, María Laura Corradini irradiaba frescura entre tanta formalidad.

Tuve el placer de conocerla hace algunos años cuando publicó su tercer disco 'Soy Mujer' y me pareció una mujer encantadora. Agradecida. Luchadora. Eso sí, si me la encontrara por la calle ahora, le daría un tirón de oreja por la senda musical que ha escogido desde que abandonó la academia de OT. Acaba de publicar su sexto álbum 'Desafiando la gravedad' y la escucha de 'Duele' o 'Buenas noticias' ratifica mis pensamientos. Siempre ha tenido una voz muy negra, acorde terrenos estilísticos muy distantes al pop que practica. Le pega más el jazz o el rythm&blues.

Pese a todo, la nueva grabación, al igual que las anteriores, transmite su admirable actitud vital. Un año después de abandonar Operación Triunfo, salió a la luz 'Mis canciones favoritas', un álbum que sacó lo mejor de Chenoa. Entonces, se animó a hacer versiones fantásticas como aquella del 'Killing me Softly'.

 

 

 

 

Publicado el 9 de octubre de 2009 a las 08:00.