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Al entrar la madrugada, escribe el lobo, no el hombre. Por eso, el instinto familiar surge sin pedir permiso. Estoy seguro de que si ahora mismo entrases en la habitación y me pillases tarareando a Stephen Demetre Georgiu, te quedarías parado un segundo para decir eso de "qué bien suena esta cinta". Poco importa que estuviésemos ante un cd o un mp3 acomodado en el ordenador. ¿Por qué tengo todos estos discos ahí amontonados? Para ponerte alguno de vez en cuando, aunque prefieras pillarme con un libro entre manos.
¿Sabes una cosa? El 'gato' Stevens se hace llamar desde hace mucho tiempo Yusuf Islam y ha dicho muchas veces que le encantan las sombras luneras. También, blasfema sobre mañanas rotas, recuerda constantemente el dolor profundo del primer amor o la naturaleza salvaje del mundo. Pero, sobre todo, habla con su hijo y le pide calma en sus decisiones, porque todavía tiene mucho que conocer. Le echa la culpa a la juventud. A ver qué te parece esta cinta. Cuídate, ¿vale? Estaré tranquilo cumples tu promesa. Que descanses.
Publicado el 19 de noviembre de 2008 a las 11:45.