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Blog de Marcos Blanco

Melómanos

En tren hasta la Vía Láctea

Archivado en: Train, Drops of Jupiter, Pat Monahan, Javi Nieves

La primera vez que escuché este teclado, me quedé frío, inmóvil, como si hubiese decidido que la vida se merecía una pausa. Estaba trabajando con mi madre en nuestro quiosco cuando, tras la publicidad, las primeras teclas hicieron acto de aparición. Al instante, los hilos vocales de Pat Monahan, tan finos como un alfiler, propiciaron el lanzamiento espacial de quien escribe hacia la Vía Láctea, saludando a los planetas, agarrando estrellas fugaces y jugueteando con la gravedad. Esta mañana, al volver de la compra, he intentado una vez más imitar el 'ey, ey', bucólico falsete, de Pat sin éxito. Y es que hay canciones que no comprenden versiones. Son incapaces de mantener el tipo cuando son adoptadas por entes extraños. Mi madre me miraba con incredulidad. Suele sorprenderle esa tendencia de su hijo a la quietud emotiva cuando agarro las ramas de la felicidad. ¡Allá voyyyyyyyyyyyy!

 

Para variar, no aguantaba más. ¿Quiénes eran estos tíos? Javi Nieves, uno de los melómanos más sensibles que rondan nuestra existencia, encendió el micrófono y me quitó la palabra. No recuerdo lo que dijo, pero estuve de acuerdo. Si la canción fuese un partido político, me habría afiliado a los cinco minutos. En las alturas neoyorquinas, nuestro ilustre locutor radiofónico descubrió el 'Trops of Jupiter' de los Train. Yo, rodeado de gominolas, periódicos y niños ansiosos por comprar cromos. Tiene guasa. A las pocas horas, le quitaba el plástico al álbum. 'She´s on fire', 'I wish you would', 'Hopeless'... Fregar los platos se lleva de otra manera cuando tus oídos están tan contentos como Macario, el insigne muñeco de José Luis Moreno. Esta banda estadounidense no dejará huella en el mundo de la música. Ni mucho menos. Pero, ahora, cada vez que escucho ese teclado me vengo arriba, despierto del letargo si allí me encuentro, recupero rápidamente el incalculable valor de los cinco sentidos. Del mismo, cuando el dolor me invade y la lucha contra los muros exteriores sólo provoca heridas, más y más profundas, he tomado como posibilidad la actitud de Pat. 'Let it roll', amigos. 'Let it roll....'

 

Publicado el 10 de enero de 2009 a las 16:00.

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'Fleet Foxes' y sus líneas melódicas

Archivado en: Fleet Foxes, Rolling Stone, Manuel Piñón, Hola a todo el Mundo, América, The Eagles

Últimamente, vuelvo a sentirme un 'Rolling Stone'. No, no me refiero al espíritu de Jagger, Richards y compañía. Hablo de la revista. Todavía inmerso en la lectura de ese 'pedaso' especial sobre los '100 mejores cantantes de todos los tiempos', hago una parada prolongada en la página 47. Manuel Piñón interroga con esa clase inherente a su persona a Robin Pecknold, cantante y supuesto líder de 'Fleet Foxes'. El quinteto de Seattle está haciéndose notar con su primer larga duración, cargado de folk setentero, psicodelía ambiental, armonías vocales tan suaves como ese masaje facial posterior al afeitado y brisas californianas. Su música amansa a las fieras, ofrece sosiego al alma. America, Eagles... ¿A qué os suena?

Esto es 'White Winter Hymnal', una de las piezas de su álbum homónimo. Piñón le comenta a Robin en la entrevista que existen interpretaciones muy siniestras en la red sobre este tema. Una de ellas, la muerte de un grupo de niños en la nieve. Pecknold discrepa. "El mensaje tiene que ver con alejarte de tus amigos de la infancia. La melodía es como la que silbarían los enanitos de Blancanieves volviendo de trabajar en la mina, y quería que la letra, más que meter miedo, sirviera para que las niñas saltasen a la comba.. Aunque ahora que lo pienso, lo que se suele cantar en esos casos suele ser bastante morboso", apunta el cantante de Fleet Foxes.

La textura celestial de esta banda habla por sí sola. "Sería estúpido ponerse a cantar cosas muy trascendentales y distraer la atención de la melodía". Robin 'dixit'. Sólo en algún caso, como en 'Tiger Mountain Peasant Song' abogan por la reflexión textual. Apasionados por el arte de El Bosco, tiran de un cuadro suyo para la portada porque, al igual que en sus obras, las canciones de Fleet Foxes ofrece muchas acciones paralelas.¡Exacto! Numerosas líneas melódicas sonando al mismo tiempo...

Si tuviésemos un programa de radio aquí y ahora, el siguiente tema en sonar sería alguno de 'Hola a todo el Mundo'. Violines, acordeones o flautas forman parte de un entrañable estilo, rememorando a formaciones como Devendra Banhart. Está nevando en Madrid y si pudiese estar tumbado en la cama observando el panorama os pincharía 'Run run zebra run Run is'...

 

 

Publicado el 9 de enero de 2009 a las 08:30.

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Lichis, qué bonito nombre tienes

Archivado en: Lichis, La Cabra Mecánica, María Jiménez, Estopa, Melendi, Arístides Moreno

Hubo un tiempo en el que Lichis y yo éramos la misma persona. Mis amigos se partían el pecho cuando manifestaba a los cuatro vientos semejante predilección por Miguel Ángel Hernando, ese ingenioso poeta que dio vida a 'La Cabra Mecánica' más simpática de ese país con forma de toro llamado... ¿España?. "Tú que eres tan lista y tan guapa, tú que te mereces un príncipe, un dentista, tú...". Con María Jiménez ejerciendo de ilustre invitada, aquella 'Lista de la compra' fue la canción del verano en 2001. La música es una fuente inagotable de prejuicios y mis colegas afilaban sus lenguas cada vez que expresaba tal devoción por el Lichis, un 'increscendo' inevitable después de saborear tema tras tema 'Vestidos de domingo'. A mí, 'plin'. Cierta noche 'verbenera', les pillé 'in fraganti' dándolo todo mientras sonaba la Cabra nada más regresar del baño. Incluso, alguno gesticulaba como si hubiese estado entrenando en casa, flirteando con las prójimas... Menuda foto.

Comentaba Miguel Ángel en su momento que durante el embarazo compositivo de 'La lista de la compra' no encontraba un estribillo y saliendo a tomar cañas en Vallecas vio un poster de María Jiménez... Resultó ser iluminación divina y la canción surgió de golpe. De forma súbita, también comencé a tararear 'Felicidad'. Hasta la extenuación. "Felicidad, qué bonito nombre tienes, felicidad vete tú a saber dónde te metes. Felicidad, cuando sales sola a bailar, te tomas dos copas de más y se te olvida que me quieres". Aquí, quiso hacerle un homenaje al cantautor canario Arístides Moreno. De bien nacido es ser agradecido, ¿no?. Con Pedro Reguillo al bajo, Carlos Hidalgo en la bateria, Julian Kanevski en la guitarra y Fernando Polaino en la guitarra española, la cabra del Lichis aunó ese aire cañí del 'pararapapa pararapachín' con el mestizaje extraído de lugares tan eclécticos como Lavapiés. Las letras ofrecen un rompecabezas imposible, tan denso, tan nítido. Desarrollan el olfato, las papilas gustativas, las comparaciones, los dobles sentidos, proponen metáforas gratamente incomprensibles. "Entre las cosas que no sé y las que no quiero saber, hay un espacio para que guardes tus cosas y te vengas conmigo". ¡Toma ya! ¡Dale Lichisssssssssssss!

Le comparaban con Estopa y han salido copias baratas de su estilo como Melendi. Pero, la autenticidad siempre será un rasgo distintivo en la obra del Lichis. Con 'No me llames iluso', canción que fue utilizada para un anuncio de la Once, Miguel Ángel Hernando se asomó al estrellato masivo. Sin embargo, cayó en el olvido comercial porque el personal pasó a catalogarlo como 'artista de un sólo éxito (o dos si queréis)'. ¿Sabes una cosa?. Mejor así, quienes te compartimos lo haremos con gustosa exclusividad. Apúntense 'Ni jaulas ni peceras', fascinante recopilatorio, y aquel álbum en que la cabra daba sus primeros pasos: 'Cuando me suenan las tripas' (1997). 'Vengo de Lavapiés, 'Mi única riqueza', 'La Reina de Mantequilla' y... bueno, ya saben, tres simples palabras puede expresar los mil demonios que llevamos dentro ante presencias o situaciones ingratadas. Ahí va el colofón, un 'temita' dedicado a esa o ese ex de insoportable recuerdo. A esos supuestos amigos cuyos principios se han caído por su propio peso. A quienes fomentan su ceguera ninguneando al Lichis... Hoy he visto muy de cerca a un representante de la segunda especie. Casi se lo digo. Mejor, díselo tú, Lichis.

 

Publicado el 7 de enero de 2009 a las 20:30.

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Mi Clio 'serie The Killers'

Archivado en: The Killers, Abellán, La Jungla, Cadena 100, Hot Fuss, Dj

Una de las grandes sensaciones de los últimos días, además de los reencuentros familiares y amistosos en esa tierra que me vio nacer, es el hecho de conducir. Vaya ordinariez, ¿no? Meto primera, segunda, giro el volante, echo un vistazo al retrovisor... Te echaba de menos, Clio. Como no, la conducción debe ir aderezada con una oportuna selección musical. Llevo de todo. Dependiendo del tráfico, de la situación térmica o de quien tenga al teléfono, pincho esto o lo otro. Evidentemente, no faltan las presentaciones radiofónicas, emulando a mi añorado José Antonio Abellán en 'La Jungla' de Cadena 100. Una de las que he repetido con más asiduidad estos días me remite al corte número 5 de unos de los mejores grupos del siglo XXI, cuyo disco de debut está entre los diez mejores de la centuria actual. Con ustedes, 'All the things that I´ve done'... ¡The Killerssssssssssssssss!

 

"I´ve soul but i´m not a soldier... I´ve got soul but i´m not a soldier"... ¡Tremendo! Por ese recorrido rítmico, por el timbre adecuado al sentimiento lírico que propone Brandon Flowers (la batería de Ronnie Vannucci Jr. es un puñetazo constante a la realidad)... Me encanta 'Hot Fuss', su atmósfera, cómo se introduce en mi riego circulatorio... y también me excita escuchar 'Mr Brightside' en cualesquiera garito rockero. Eso sí, querido Dj, no vuelvas a cortar la canción por la mitad porque te arranco las orejas. 'Sawdust', el álbum de remezclas 'killeriano' incluye esta apoteósica versión discotequera del señor de marras... ¿Quién se anima a presentarla? "I never, I never, I neverrrrrrrrrrrrrrrrrrr...".

'

 

 

 

Publicado el 30 de diciembre de 2008 a las 13:15.

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Los zapatos de Paolo Nuttini

Archivado en: Marcos Blanco, Paolo Nuttini, new shoes

Hacía un frío de mil demonios en la ´Prospe', el precioso barrio madrileño donde residía hasta el año pasado. Ese tremendo abrigo que había adquirido a modo de ganga en Portobello necesitaba una limpieza. Recados matinales. Visita a la tontería. Cuando me lo devolvieron, parecía nuevo. Sucede que alguna pertenencias personales semejan nuevas cuando las abandonas durante un tiempo o, simplemente, dejas de mirarlas buenos ojos. Punto y aparte. Llevaba los auriculares a todo volumen, sintonizando a mis chicas favoritas de 'Radio es tres', en Radio 3, cuando, tras un reflexivo relato, sonó esto...

 

¡Ohhhhhh! ¡Sensacional! "Hey, I put some new shoes on, and suddenly everything is right. I said, hey, I put some new shoes on and everybody's smiling, it so inviting..." Cuando la canción estaba a punto de acabar, sólo deseaba una cosa: que la loctura mencionase el nombre del artista. ¿Cuántas veces me habré enganchado a un temazo sin saber de quién es y no habrá servido de nada cantárselo a todo Dios? ¡Sí! ¡Lo dijo! Sonaba 'New shoes' de Paolo Nuttini. Apenas 20 añitos. Escocés, pese a su apellido italiano. 'These Streets' era su primer trabajo discográfico. Esa misma tarde, hurgando en una tienda de discos de segunda mano cerca de Ópera... ¡allí estaba! Bonito, bonito. Sobre todo, las piezas más tranquilas, 'Last Request' o este 'Million Faces'...

 

Publicado el 19 de diciembre de 2008 a las 11:15.

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Ana Alcaide y su viola de teclas

Archivado en: Marcos Blanco, Ana Alcaide, Toledo

Andaba hiptonizado por Toledo, sucumbiendo a sus encantos en cada rincón, cuando nada más salir de la catedral detuve mi paso. ¿De dónde procedía aquel sonido? Cual ratón tras el flautista de Hamelin, perseguí esas notas tan reconocibles. En 'miña terra galega' existe un canción popular que traducida al castellano dice algo así como "el mandil de Carolina, tiene un lagarto pintado, que cuando Carolina baila, el lagarto mueve el rabo..." La letra encajaba perfectamente en aquella especie de... ¿violín? Al doblar la esquina, allí estaba aquella mujer. Con un vestido medieval precioso, tocando su viola de teclas, transmitiendo sensaciones angelicales. No pude reprimir el impulso y le compré uno de los discos que allí vendía por 10 euros. Aclaré mis dudas.  Aquella canción tan conocida para mí es una canción castellana con más años que Matusalén. Un clásico del folk zamorano, según la red. Formaba parte de 'Debajo de los tilos', uno de los cortes incluídos en 'Viola de teclas' (2006), mi emotiva compra toledana. Otro de ellos, este 'Hixa mia'...

Entonces, tocó investigar, como viene haciendo ella durante toda su vida. Una beca para completar sus estudios de biología en Suecia hizo posible que conociese el Nyckelharpa (viola de teclas), un instrumento medieval minoritario y poco conocido fuera de aquellas fronteras. Ahora, va camino de ser un prodigio en estas lides, partiendo de una metodología autodidacta. Grabó un primer disco precioso, entre rabeles, violas y violines. Ritmos castellanos, flamencos, melodías sefardíes, rabeladas cántabras, piezas renancentistas... Quienes visitan Toledo suelen caer rendidos a su música cuando hace acto de aparición (compagina tal residencia con sus estudios en Malmoë) y, grano a grano consiguió su propia cosecha: casi 15.000 discos vendidos. El pasado año, publicó su segundo álbum: 'Como la luna y el sol'. Ella representa el esfuerzo de quienes luchan por hacer popular esos instrumentos, esas composiciones, que algún día y en algún lugar... lo fueron. Cuánta paz nos regalas, Ana.

Publicado el 18 de diciembre de 2008 a las 10:30.

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Al compás de THC

Archivado en: Marcos Blanco, TCH, Positive, Time for Free, Sophistik, Navarra, Rock in Rio Madrid

Mientras intento superar el efecto 'Beggin', quiero rendir tributo a unas de las bandas nacionales que mejor combina jazz, house, funk, R&B y lo que les pongan por delante. Con ustedes, 'THC'. Este proyecto, que está a punto de cumplir una década, nos regala un último trabajo apabullante: 'Positive'. Desde 'Get on the beat' hasta 'Zaidi Zuria'. Diez temas que transmiten una coherencia tremenda, un eclecticismo soberbio. Esas sonoridades abiertas, esos acordes suspendidos... Timbres electrónicos, a la par que naturales. Como dice Eva, una de las voces en este cotarro, en THC es posible encontrarte un piano latino, al rato acordes de bossa, minutos después algún guitarreo rockero, para variar enseguida hacia una balada rapeada. 'Time for free' es uno de los ejemplos más representativos del sonido 'THC'. Hace referencia al valor del tiempo, tan caro, tan gratuito...

Debussy, Beady Belle, Incognito, Miles Davis, The Brand New Heavies, Bah Samba, Saint Germain o Zuco 103 son algunas referencias musicales del grupo navarro, al que todavía no he podido ver en directo. El pasado verano aparecieron por Rock in Rio Madrid como ganadores del concurso de música electrónica organizado por el festival y Terra. Tocaron tres temas sobre el Hot Stage. Actuaron nada más abrirse el parque, por lo que no había demasiado público, pero aquí tenéis una nueva muestra de su buen hacer... ¡Sophistik!

 

Publicado el 17 de diciembre de 2008 a las 08:45.

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'Beggin' me persigue

Archivado en: Marcos Blanco, Beggin, Madcon, hip-hop, Noruega, Frankie Valli, Grease

¿No te ha perseguido nunca una canción? La escuchas, queriendo o sin querer, y se mete dentro, como si atraviese tu epidermis, la dermis, superando todas las barreras posibles, sobre todo la razón, para integrarse en tu proceso circulatorio, mezclándose con la sangre, saliendo y entrando de los pulmones... Entonces, ese bucle paranoideal crece sin parar. No tiene medida. El vecino sale despavorido del ascensor con tu cantilena, tus compañeros de acera cruzan la calle porque creen estar frente a un loco... Las reacciones, infinitas, variopintas.

Poco antes del Barça-Madrid, me enganché a una. 'Beggin, beggin you. Put your loving hand out baby. Beggin, beggin you. Put your loving hand out darlin...' Me sonaba por un anuncio, pero la verdadera dimensión del 'Beggin' de los Madcon me tiene totalmente abducido desde el sábado-noche. Tiene este grupo de hipo-hop noruego un aire a Outkast, una leve brisa a Black Eye Peas y provoca un efecto sonoro en mis pabellones auditivos similar al 'Crazy' de Gnars Barkley. Ganas de bailar, bailar... ¡bailar! Pues bien, resulta que Madcon (Mad Conspiracy) son dos, Tshawe Baqwa y Yosef Wolde-Mariam. El primero, alemán, de padres sudafricanos, criado en Noruega. El segundo, noruego, pero con orígenes etíopes y eritreos. Son famosísimos en aquel país, Noruega. Su álbum 'So down the con of man', un gustazo. Inesperadamente, toca compartir la devoción 'madconiana' con el gran Frankie Valli, autor junto a su grupo Four Seasons de este tema allá por los 50. Sí, sí, el mismo que popularizó 'Can´t take my eyes of you' o 'Grease'. Olé, olé y olé. Por los unos. Por los otros. Con vuestro permiso, sigo a lo mío. 'Beggin, beggin you. Put your loving hand out baby. Beggin, beggin you. Put your loving hand out darlin...'

Publicado el 15 de diciembre de 2008 a las 16:00.

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Del sofá a Copenhague

Archivado en: Marcos Blanco, Vetusta Morla, Un día en el mundo

De repente, tienes una hora. No sabes qué hacer. Miras hacia la estantería. Allí estan los discos, muchos discos... y ahora, ¿Qué? Veamos. Decido pasar 'Un día en el mundo' con Vetusta Morla. Pillo los auriculares, me tumbo en el sofá, cierro los ojos y completo sus palabras con las mías, sus melodías con mis biorritmos. Lo saben. Para degustar un disco, para exprimirlo como unas ricas naranjas en búsqueda de todo su jugo, es preciso abandonar cualquier tarea añadida. Expectantes, los cinco sentidos.

Corte uno. 'Autocrítica'. El tiempo se detiene. Doce historias. Cantan demasiados sentimientos que me resultan familiares. Se acercan los recuerdos, aparecen asociaciones aparentemente incomprensibles. Pierdo cualquier contacto con la realidad, vuelo, nado, visito lugares desconocidos, entro en esa dimensión donde cada segundo es una caída libre sin control. Menos mal que tengo compañía. Pucho, David, Álvaro, Jorge, Guillermo... y Juanma.

El primer álbum de estos seis tíos de Tres Cantos es como un día en el mundo. Con sus variaciones anímicas, los imprevistos, esas obligaciones, las risas, los nervios, novedades, nubes, chaparrones, luces celestes, la luna... Sin darte cuenta, aparece el silencio. Como si se tratase de un libro, se ha acabado la última página de la novela. Y ahora, ¿Qué? Regreso a Copenhague para correr con ese chico al que nunca le enseñaron a andar. Después, acompaño a la joven que huye de espejismos y horas de mar. "Dejarse llevar suena demasiado bien, jugar al azar, nunca saber donde puedes terminar o empezar..." Insisto con el corte 4, adictivo, deprimente, exultante. Y otra vez. Y otra. Desde el sofá, Copheangue está a cinco minutos de mis entrañas. Y otra...

 

 

Publicado el 12 de diciembre de 2008 a las 12:15.

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¿Coincidencias?

Archivado en: plagios, Viva la vida, Coldplay, Joe Satriani, Michael Jackson, Al Bano, Madonna, Mecano

Joe Satriani está cabreado. No me extraña. Como muchos habéis leído y escuchado, su riff en 'If I could fly' del álbum 'Is there love in space' (2004) se parece muchísimo al que utilizan los Coldplay en el tema 'Viva la vida'. De hecho, les ha puesto una demanda. ¿Con razón? Juzguen ustedes mismos. Pero resulta que a la famosa canción del grupo británico también le ha salido otra similitud extraordinaria. Se trata del 'The songs i didn´t write', escrita y desarollada por un grupo indie estadounidense llamado Creaky Boards. Los agentes del grupo liderado por Chris Martin han esgrimido que éstos grabaron tal composición en marzo de 2007, antes de que saliese a la luz la canción de la formación americana cuyo cantante responde al nombre de Andrew Hoepfner. Además, según Quico Alsedo, autor del brillante blog 'sexo, drogas y rock & blog' en el mundo.es, la cancioncita de marras también bebe del 'J'en ai marre', de Alizée. ¿Y qué argumentan los chicos británicos tras el enfado de Joe? Pues nada, que "son meras coincidencias". ¿En serio, Chris? "Satriani no ha escrito ni ejercito ninguna influencia en Viva la vida", según el cantante de Coldplay.

La polémica coincidencia en "pasajes originales sustanciales", como ha señalado Satriani, entre ambos temas provoca múltiples interrogantes en mi interior. ¿Dónde están los límites para conseguir una canción como plagio de otra? ¿Tendrá cada grupo o artista un chivo expiatorio encargado de robar melodías para luego darle otra vuelta al gusto de cada uno? ¿Son estas situaciones una demostración de las verdaderas influencias musicales que poseen muchas bandas?

Navegando por la red puedes encontrar decenas de vídeos con sorprendentes casualidades. Por ejemplo, ésta más que conocido y reconocido en los tribunales de Michael Jackson a Al Bano: el 'I cigni di Balaka' convertido en 'Will you be there'. 'Jako' se lleva la palma en estas lides. Sino, escuchen la procedencia de 'You are not alone'. Por cierto, el Frozen de Madonna también tiene procedencia belga (Salvatore Acquaviva). Huele bastante mal el 'My sweet lord' de George Harrison si escuchas 'He´s so fine' de The Chiffons, 'Aire' de Mecano si te ponen antes el 'Faithfullness' de Skin, cierta canción de Maná si recuerdas 'Wonderwall' o, si nos ponemos tontitos, ¿no se parece el 'octavo día' de Shakira al 'Dream On' (Aerosmith)? ¿Y 'Galilea' de Sergio Dalma a 'The Best', temazo de Tina Turner? Coincidencias, influencias, asimilaciones propias... Dependiendo del país, La legislación establece un mínimo de entre 3 y 8 compases repetidos para considerar una canción como plagio. Aquí tienes algunos ejemplos para hacer la prueba. Por cierto, ¿cuál es la 'coincidencia' más bestia que conocen? Comenten, comenten.

 

Publicado el 9 de diciembre de 2008 a las 13:00.

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Marcos Blanco

Marcos Blanco

Vigués. Gallego. Periodista 'todoterreno'. Entusiasta de la vida. Melómano. Loco del deporte. Celtista. Enérgico. Radiofónico. Así es Marcos Blanco, periodista que actualmente colabora en el Grupo de Comunicación Gente  con este blog, que nació un 19 de noviembre de 2008 con un 'post' sobre Jamie Cullum.

 

Esta web ha funcionado durante todo este tiempo como una banda sonora diaria, repleta de canciones que nos hacen amar la vida. Recuerdos, descubrimientos, opiniones, novedades, entrevistas o crónicas de conciertos han formado parte de 'Melómanos' y seguimos en la brecha:

 

marcosblancohermida@gmail.com

 

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