De la hojalata al Madelman, vuelve el juguete 'vintage'
Pequeños museos madrileños como Curiosity Shop o Antonio Juguetes Antiguos nos muestran su mayor tesoro, lo más buscado esta Navidad.
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Foto: Rafa Herrero
gentedigital.es/P.Costa
07/12/2012 - 09:06
Entramos en las llamadas tiendas de la nostalgia, pequeños museos madrileños que nos trasladan a épocas pasadas, a los Madelman, a los Geyperman, a locomotoras de los años 20, coches teledirigidos de los 60, Nancys... Comercios a los que muchos acuden por estas fechas en busca de alguna propuesta diferente para los suyos.
En la calle Latoneros 1, haciendo honor al oficio, descubrimos Curiosity Shop, un negocio que lleva 25 años en marcha especializado en juguetes de hojalata como un mono de 1900 que toca el xilófono, o una caja de música de la que sale un inesperado roedor. Estas son las primeras piezas que nos muestra Alberto, su dependiente, sin olvidar "los musicales". En otra estantería, perfectamente ordenados, se exponen carruseles con diferentes melodías, iluminación y movimiento; o un circo con un desfile de animales incluido, acróbatas y tecnología led. "También hay norias, pistas de esquí, sinfonías de campana, o este teatro de madera con cambio de personajes y decorado", explica sonriente.
Mientras hablamos, varios clientes se enganchan al escaparate. "Busco un carrusel para un niño, que tenga movimiento, para que lo pueda disfrutar cuando crezca, y me gustaría también un caballo de esos que hacían de balancín", pide Isabel, que disfruta de las compras navideñas. Su primer juguete, recuerda, fue una muñeca vestida de enfermera, de cartón piedra. Le hacemos la misma pregunta a Milagros. otra interesada que abre la puerta de Curiosity Shop. "Mi primer juguete fue una muñeca de trapo que me hizo mi madre. Ahora busco algo original para una niña de seis años. La maquinita de todos los días es demasiado".
Queda claro que lo 'vintage' ha vuelto a conquistarnos. "El ser humano siempre se ha visto atraído por cosas que se han hecho en otras épocas con mucho empeño, y resurgirlas nos da placer. Hoy, aunque se incorpore mucha modernidad, el combinarlo con lo vintage le da un toque especial", concluye Alberto. Larga vida a lo antiguo.
"Antes pedían más piezas de Rico o Payá"
A diez minutos caminando descubrimos otra joya: Antonio Juguetes Antiguos (Plaza del General Vara del Rey, 11), un negocio inaugurado en 1976 y dedicado al tren eléctrico. "La mayoría viene buscando juguetes de los años 60, Madelman, Geyperman... Todos nos volvemos a convertir en niños y hay mucho coleccionista, aunque hace unos cuantos años se pedían más piezas de los 30, 40 ó 50, de las marcas Rico, Payá...", apunta. En las estanterías se apilan soldados de plomo, aviones de Pilen, alguna Nancy y Mariquita Pérez, coches teledirigidos, también de Nacoral.. Pero su mayor tesoro es una locomotora alemana metálica de los 50 que se puede adquirir por unos 200 euros. "Las hay de hasta 1.000 y lo pagan", asegura.
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