Gente digital

Después de un largo periodo de trabajo y varias pildoras en forma de singles, ‘MAD MEX', el álbum de Paralelo 40, ya es una realidad. La banda compuesta por Fernando Fu y Ángel Reyero presenta un LP compuesto por doce temas del que nos hablan en esta entrevista.

¿Qué primera valoración hacéis del álbum?
Fernando Fu: Muy buena, teníamos muchas ganas de que saliera después de cinco o seis sencillos. Ha sido un parto largo, pero la verdad es que ha ido muy bien. En YouTube, 'Ofendidito', al ser un tema polémico, va bastante mejor de visitas que los otros. Contentos con todo lo que se viene. En primer lugar sacaremos los vídeos de los temas que faltan del disco, que fue el plan original, y tocar en todas las opciones que nos surjan.

Por escuchas, una de las canciones que mejor está funcionando es 'No quiero odiarte'.
Ángel Reyero: En general todas las canciones están funcionando bien. Soy sincero, yo ni tengo redes ni las miro, los números no me los sé. Pero hemos podido hacer algunos conciertos en este tiempo, la respuesta del público es muy buena y nosotros lo estamos disfrutando mucho en el escenario. Ahora que está el disco lanzado, habrá canciones que gusten más que otras pero la ventaja es que ya están todas disponibles para que elijan.

Al mismo momento de publicar el disco lanzábais 'Ofendidito'. ¿Habéis sido víctimas en algún momento de ese tipo de críticas?
Fernando Fu: Obviamente sí. Cuando tienes redes sociales y empieza a haber 'hate' es, en cierto modo, una buena señal porque empiezas a importar. La primera vez que lo vivimos fue con 'Fe de erratas', una canción que hablaba de una ex, y nos acusaron de no querer que hubiera segundas oportunidades. Está todo muy desquiciado. Como artistas y compositores hemos notado que de unos años a acá te autocensuras, le das demasiadas vueltas a todo por si molesta a alguien. Estamos cortando alas al arte y al humor, creo que es muy grave. Hicimos una canción de eso, con un punto irónico y gracioso pero con un mensaje real, que se está perdiendo la libertad de expresión.

¿Cómo os ha afectado esa autocensura?
Fernando Fu: Nos ha pasado mucho con canciones de antes. Una que teníamos con Circo Pop, 'Mala', ahora no podríamos sacarla.

Ángel Reyero: Esa canción fue más conflictivo el vídeo. En nuestro caso, por el estilo de música que hacemos no nos ha llegado a afectar mucho, tal vez más a la gente de urbano. Queríamos hacer una crítica a que se está haciendo una sociedad de blandos, básicamente. Soy el primero que dice que hay que respetar a todo el mundo, hay ciertas bromas que se hacían años atrás que está bien que la gente joven no las repita, pero hay que llegar a un término medio. Por ejemplo, con el tema del 'bullying' hay casos de entrenadores en Estados Unidos que están enseñando a los chicos a defenderse. Desde que hay redes, todo el mundo tiene derecho al llanto y a la protesta, pero creo que hay una falta de sabernos defender. Nos hemos metido en una dinámica de prohibir y judicializar todo.

Fernando Fu: Es una espiral con la que podemos volvernos locos con cosas absurdas, porque hay tantas opiniones y sensibilidades.

Ángel Reyero: También veo que cada vez hay gente con menos ocupaciones, con más tiempo libre y redes sociales; si uno está trabajando o atento a sus cosas, no le da demasiado espacio a tantas gilipolleces. Hay cosas intolerables, como la discriminación o los insultos. Luego se protestan por cosas que no tienen mayor repercusión, como el color de la camiseta de una selección, y solo es por la cantidad de tiempo libre que tiene la gente y por el hecho de que las redes sociales dan voz a todo el mundo.

Esto enlaza con el revisionismo...
Fernando Fu: Las cosas tienen un contexto histórico y hay que respetarlo. He leído que hay una figura en el mundo de la literatura que es especialista en revisar texto y hacer recomendaciones sobre si hay aspectos que pueden ofender a algún colectivo. Es una locura. Las redes sociales son el epicentro de todo. Si años atrás te juntabas con tus amigos y a alguien se le había muerto el padre, obviamente no hacías bromas sobre ello. Ahora lo cuentas en redes sociales y puedes encontrarte con un montón de personas a las que se les haya muerto el padre y te acaban odiando. La gran pregunta es qué prevalece, el derecho a la ofensa o a ofender. A partir de ahí que cada uno saque sus conclusiones. Si las sufragistas hubieran pensado que ofendían a los hombres, ninguna mujer hubiera votado.

Hay una parte de la canción en la que decís "soy un facha, comunista, soy machirulo y a la vez soy feminista". ¿A qué creéis que se debe esa tendencia a ser criticado de cosas tan opuestas por una misma opinión?
Fernando Fu: Queríamos exponer esos estereotipos que nos arrojamos aquí, en España, y echarlos todos al saco. Por desgracia somos muy de catalogar a la gente o de bandos. Somos así. En la canción queríamos exponerlo y ver que se puede decir una opinión sin que se meta en un mismo saco a todo el mundo.

Sobre el ritmo de la canción, antes de entrar la guitarra eléctrica, hay unos tonos muy de verano.
Fernando Fu: Va muy acorde a la letra. Empieza fresquita, ligera, pero luego se recrudece y entra el rock para dar más peso también al mensaje. Surgió a la hora de producirlo, nos pareció que podría quedar bien. Creo que quedó bastante bien.

¿Cómo surgió la idea de meter en el videoclip a gente tan conocida como Leo Harlem?
Ángel Reyero: Obviamente hay una intención de que tenga más alcance. La música ha pasado a ser lo último del producto, puedes hacer muy buenas canciones pero tienen que hacerse virales. Ha cambiado la industria, antes hacías la música y después te hacías viral, ahora la gente necesita cosas virales para detenerse a escuchar la música. En el caso de Leo Harlem la gracia está que, además, ha sacado la película 'Como Dios', que va en la onda del videoclip. Se ha dado esa coincidencia.

Tampoco podemos ir contra la forma de consumir del público. No sucede solo en la música, ahora la gente apenas ve el fútbol, prefiere la Kings League de Piqué; en boxeo seguro que la velada del campeonato de Europa la ve menos gente que la que organiza Ibai Llanos. Al público le da igual que un artista sepa tocar o cantar, lo que quiere es divertirse y bailar la canción de turno. No se puede ir contra el mercado y el gusto del público. Las compañías promocionan la música en TikTok, ¿cómo haces para vender una canción en unos pocos segundos? Es muy complicado, pero hay que adaptarse a ello, la gente no te presta atención más allá de 15 segundos.

Fernando Fu: Esto no ha sido de golpe. Hemos pasado de canciones de cuatro minutos a que nos dijeran desde la discográfica que un tema no puede superar los tres minutos o que un estribillo no puede entrar más tarde de los 30 segundos. Ha ido todo cociéndose poco a poco hasta llegar a los 30 segundos de las 'stories' o los 15 de TikTok. Esta revolución nos ha llevado a que la forma de consumir ha cambiado. Claro que hay un nicho, gente que quiere escuchar tu música, pero a nivel masivo necesitan engancharse con algo, ya sea la historia o el personaje, y luego viene la música.

Hablando de todo esto, vuestra apuesta por hacer un LP, ¿ha supuesto que alguien dentro de la industria os dijera que no era lo correcto?
Fernando Fu: Ha sido la manera que hemos tenido siempre de hacer las cosas, adaptándonos un poco a cómo se hace todo ahora. A no ser que sea el disco 'Más' de Alejandro Sanz no se sacan siete sencillos, las opciones de hoy en día te permiten otras cosas. Hemos ido sacando temas para que llamen la atención, que la gente se acercara a nuestra música y ya, tras un recorrido, hemos lanzado el álbum. Queríamos darnos el capricho de sacar un disco, habíamos publicado algún EP, pero queríamos algo más conceptual.

¿Cómo de difícil es defender vuestra música en una industria que apuesta de forma masiva por el urbano?
Fernando Fu: Eso no nos ha preocupado tanto. En España hemos estado tanto tiempo haciendo lo mismo que ahora hay muchos chavales que ahora hacen pop rock. La nostalgia ahora mira a los años 2000 y se puede ver a Blink-182 llenando en Coachella. Hay un público joven que quiere seguir escuchando pop rock de corte clásico.

Ángel Reyero: Entiendo que, de cara a las multinacionales, interesa ir donde está el mogollón. Para nosotros, cuando nos preguntan sobre el reguetón, es como si a un futbolista le preguntas por baloncesto: le puede gustar o no, pero no es su terreno. Es algo a lo que nos ha llevado la industria. Si el número uno del mundo es Bad Bunny, la discográfica de turno quiere algo parecido porque está para hacer dinero. Si eso es el 'mainstream', no tiene sentido que nosotros, con nuestra edad, nos queramos meter a codazos ahí. Hay que saber dónde estás y que mucha gente de nuestra edad quiere otro tipo de música, por eso funcionan los 'revival'. El 'mainstream' se ha olvidado de hacer música para la gente de 40 años para arriba.