El primer ministro francés, Manuel Valls, ha atribuido a la «ira y el cansancio cotidiano» la clara derrota de su partido, el Partido Socialista, en la segunda vuelta de las elecciones departamentales celebradas este domingo.
El primer ministro también se ha referido a los resultados del Frente Nacional, que podría lograr la mayoría en algunos departamentos, y ha advertido de que este resultado «es un desafío para los republicanos» y ha reconocido que es un signo de «la irrupción duradera en nuestro paisaje político» de la extrema derecha.
«Los franceses han expresado su ira, su cansancio ante una vida cotidiana muy difícil. He escuchado el mensaje. Mi gobierno seguirá respondiendo», ha afirmado Valls en comparecencia pública tras el cierre de las urnas, según recoge ‘Le Figaro’.
Valls ha destacado que «la economía va mejor gracias a las reformas» y ha asegurado que ya se están atisbando los primeros signos de recuperación «aunque aún son poco perceptibles». «Mi gobierno redoblará sus energía con una prioridad: empleo, empleo, empleo», ha apostillado. En cualquier caso, Valls ha atribuido la derrota de la izquierda a que estaba «muy dividida en la primera vuelta».
El primer ministro también se ha referido a los resultados del Frente Nacional, que podría lograr la mayoría en algunos departamentos, y ha advertido de que este resultado «es un desafío para los republicanos» y ha reconocido que es un signo de «la irrupción duradera en nuestro paisaje político» de la extrema derecha.