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Jul 13

El PSM no quiere nada con el PP

La Asamblea de Madrid se mantiene inhábil, a la espera de que la Diputación Permanente, máximo órgano parlamentario en periodos inhábiles, decida, si el PP, partido mayoritario, consiente algún acto en pleno mes de julio. Los partidos se reunieron para ultimar el funcionamiento de la Comisión de Reforma de la Ley Electoral de la Comunidad de Madrid, que se reunirá los días 9 y 17 para tratar de sacar algo en claro que ayude a la regeneración de la clase política y a la implementación de la democracia en sus decisiones y prácticas. El socialista Tomás Gómez asegura que “no es momento de acuerdos y pactos con la derecha” y con cierta ironía se pregunta si el entendimiento con el PP tiene que ser para reformar el sistema de pensiones o privatizar un poco más la sanidad y la educación públicas. Quizá por este motivo se negó a acordar una reducción del número de diputados regionales, y quizá por la misma razón, o la contraria, apoyó poner en marcha algún tipo de reforma electoral, que debería incluir, sin duda, las primarias, abiertas o no a los simpatizantes, para todos los partidos y los derechos del parlamentario a ser puesto en una lista con más apoyos que los que rodean a los mandamases de las cúpulas de la organizaciones y a preguntar y pensar por cuenta propia sin necesidad de atender los mandamientos y rezos diarios ordenados por los capos de turno. Tomás Gómez, que lleva demasiado tiempo persiguiendo a los que están pringados en casos de corrupción del PP, cada vez habla menos de otras corrupciones como las relativas a los ERE de Andalucía, cuyo presidente ha anunciado unas primarias con nombre fijo, el de la persona elegida a dedo por los sostenedores del régimen, aparentando con un gesto democrático lo que parece ser una huida hacia adelante. No será que el destinatario de sus mensajes es Rubalcaba, que recientemente acordó con Rajoy no sé qué sobre Europa, la marca España y la juventud parada. Todo puede ser pero da la sensación que Gómez habla cada vez más para sí mismo como si fuese el centro de la nada.