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Mar 11

Asesinato en la víspera del Día de la Mujer

Una mujer fue asesinada en Fuente el Saz  por su mal llamado compañero del que se iba a separar oficialmente en unos días.  Había orden de alejamiento porque el terrorista de género era, además, un cobarde  maltratador. Sucedió el 7 de marzo, la víspera del Día de la Mujer, y el 8 de marzo,  diputados y trabajadores de la Asamblea de Madrid permanecieron en silencio  durante 5 minutos para rechazar este crimen machista. A la asesinada no le dio  tiempo a manifestarse con otras muchas mujeres y hombres para no olvidar que  siempre que hay una muerte, es una ocasión perdida en esta  batalla y que si se puede impedir que una ley se quebrante por un maltratador,  habremos ganados todos, también los que no supieron o no pudieron detectar este  fallo.

El 8 de Marzo se celebraron todo tipo de actos para  hablar de lo que se ha avanzado en los últimos años y de lo que queda todavía  por hacer. Cobran menos que los hombres y tienen más problemas de los  necesarios para acceder a un empleo sin dejar de ser mujer o madre. También son  asesinadas por esos hombres que todavía no se han dado  cuenta de que el respeto y la libertad son tan importantes en sus  relaciones con  el otro sexo como el poder, la fuerza, la chulería y el ordeno y mando que creen  tener sólo por el hecho de ser machos machotes con derecho a todo. Las leyes contra la violencia de género deberían servir para aminorar el daño  que se puede producir si salta lo que se mantiene en las cabezas de mentes  enfermas capaces de hacer sangre y crear dolor en su entorno familiar.

Asesinan  a mujeres porque son suyas, meten el miedo en el cuerpo de sus hijos convertidos  en rehenes de su enfermiza posesión y grado de hombría. Basta ya.