Entrevista a psicóloga cubana que investiga e interviene contra la violencia de género
1 Abr
Como conté en un anterior post, Cuba se encuentra en el lento proceso de asumir la violencia de género como un problema social, después de años de ser obviada, tanto por la ciudadanía como por las instituciones. En los últimos años ha habido gestos significativos, como que el Partido Comunista incluyera en 2011 la lucha contra la violencia de género entre sus ejes de trabajo. El pasado marzo, un grupo de feministas lanzó una campaña de recogida de firmas con el fin último de reclamar una ley contra la violencia de género, una red de atención jurídica y de salud que asista a las víctimas, y llamar a que se debata sobre el tema en todos los espacios sociales.
En mi viaje a Cuba en enero de 2012, cuando pregunté por expertas en violencia de género a feministas académicas y autónomas, me dieron referencias contadas, lamentando que aún hoy escasean las iniciativas institucionales y académicas para estudiar y abordar en profundidad este problema social. Me hablaron de la Universidad de Cienfuegos como pionera en trabajar el tema, con la psicóloga Laura López al frente de un equipo multidisciplinar que investiga sobre violencia, atiende a las víctimas, capacita a diversos agentes sociales y sensibiliza a la población. Así que me puse en contacto con ella y la entrevisté en su despacho de la Facultad de Medicina. Como me ocurrió en otras muchas entrevistas, noté a la experta a la defensiva ante una periodista extranjera, poco dispuesta a reconocer carencias en el sistema cubano. Aunque me interesaba que me hablase de la situación en todo el país, como buena científica, evitó opinar y se ciñó a hablar de su trabajo en la provincia. Ahí va la entrevista:
Laura Magda López Angulo, psicóloga especializada en violencia de género
«La mayoría de mujeres denuncian malos tratos diez años después de empezar a sufrirlos, lo que implica que perdieron libertad y calidad de vida a edades tempranas»
La psicóloga Laura Magda López Angulo lleva más de una década trabajando en el estudio de la violencia hacia las mujeres en la provincia de Cienfuegos. Lo hace con el apoyo de un equipo multidisciplinar en el que ha ido implicando a juristas, fiscales, educadores y comunicadores, a fin de abordar la violencia de género como un problema de salud pública, pero también como un problema social que exige involucrar a toda la ciudadanía.
¿Cuántos asesinatos machistas se contabilizan al año en Cuba?
No contamos con el dato nacional de las mujeres fallecidas por homicidios por parte de sus parejas. En nuestra provincia hemos contabilizado la muerte de más de 40 mujeres a manos de sus esposos. Además, la mayoría fallecen en edad reproductiva, lo que afecta mucho a la esperanza de vida. Por no hablar que esa violencia también ha repercutido en su salud, en su calidad de vida, bienestar y desarrollo. Las mujeres que sufren violencia casi siempre se deciden a denunciarlo pasados diez años de los hechos. Esto implica que perdieron su libertad y su calidad de vida a edades tempranas.
¿Las mujeres son asesinadas una vez deciden abandonar a sus parejas?
En Cienfuegos no tenemos datos para conocer si estas 40 mujeres habían denunciado sus parejas. En los casos que yo conozco, casi siempre eran mujeres ya separadas del hombre, y que habían solicitado ayuda tanto a la policía como a los servicios de salud.
¿Y qué datos tienen sobre la situación de las mujeres que viven violencia de género en Cienfuegos?
Son mujeres que padecen muchos trastornos de depresión y ansiedad. Casi el 70% de las mujeres que son maltratadas han intentado atentar alguna vez contra su vida. También hay un alto índice de enfermedades de transmisión sexual. El año pasado, los cuatro casos de mujeres diagnosticadas de sida habían sido víctimas violencia de género, y el 60% de las diagnosticadas de otras enfermedades de transmisión sexual también habían sufrido algún tipo de violencia de género. También resultaron haber sido víctimas de violencia por parte del esposo buena parte de las mujeres que dieron a luz a bebés prematuros o de bajo peso. En el año 2001, en Cienfuegos, en más de un 70% las mujeres declararon ser víctimas de violencia tanto física como psicológica. Se trata de una prevalencia mucho más alta que la de otros países. Un sesgo puede ser la forma directa y precisa en la que preguntamos: “¿En los últimos seis meses, ha sido usted empujada, abofeteada, etc. por su esposo?” El 70% contestaron que sí. Estamos haciendo la segunda medición para ver si diez años después la prevalencia ha disminuido o aumentado. Sí que ha aumentado el número de denuncias. En el año 2000, acudieron a denunciar en Cienfuegos, aproximadamente, unas 300 mujeres. En el año 2009, más de 700. Esto no prueba que haya más violencia; puede ser que se denuncie más gracias a la labor de visibilización del problema.
¿Cómo lo han logrado visibilizar?
Los medios de comunicación aquí en Cienfuegos, sobre todo la radio y la televisión, nos han apoyado en la divulgación del problema, lo que ha permitido no solo sensibilizar y movilizar, sino establecer estrategias de coordinación entre sectores, tanto de información y capacitación como de actuación. Periodistas de la televisión de Cienfuegos han ganado premios nacionales con reportajes sobre la violencia contra las mujeres en la provincia. En la prensa local conozco al menos cuatro trabajos que han abordado el tema. Nos han apoyado también los artistas plásticos, con cértamenes de pintura, actividades de educación con niños… También hemos divulgado guías metodológicas en los centros de salud para que la ciudadanía sepa apoyar a una vecina que sufra violencia, e incluso dirigidas a los hombres, para que conozcan las penas que tendrán que cumplir si ejercen violencia. Lo que no hemos medido es hasta qué punto las personas han incorporado esos conocimientos.
En España se ha logrado cierta movilización social cuando una mujer es asesinada: los medios lo cuentan, las feministas convocan manifestaciones… En Cuba mucha gente a la que he preguntado sobre violencia de género me ha asegurado que eso aquí no ocurre, tal vez porque los medios no acostumbran a informar sobre ello.
Yo sí que he divulgado los datos por los medios de comunicación masivos. Quizá hay otros problemas de salud en los que se aportan más cifras. Lo que pasa es que, como usted bien sabe, en este caso no solo hay una invisibilización del problema, sino una justificación y legitimación. Gran parte de la población sigue viendo como normales actitudes que suponen violencia psicológica.
En Cuba están muy extendidos dos mitos: que no hay violencia de género porque la mujer cubana es muy fuerte, y que en todo caso la violencia es bidireccional: “Es que la pareja cubana es muy pasional, aquí los dos se fajan entre ellos; las mujeres también golpean a los hombres”.
Los estudios que he realizado indican que las mujeres que denuncian el delito tratan de evitar y huir de la violencia; no discutir, no enfrentar. Sin embargo, las mujeres que no son víctimas de violencia sí que utilizan modos de reevaluación cognitiva a la hora de abordar un conflicto de pareja.
¿Reevalución cognitiva?
Evaluar la percepción que él tiene del conflicto, por qué discuten, buscar una comunicación asertiva entre los dos. Resolver el problema y también asumir las responsabilidades de cada uno. Nosotros sí hemos estudiado como influye la identidad de género en estas mujeres que denuncian el maltrato: tienden a ser mujeres tradicionales que responden al estereotipo de esposa y madre. A pesar de que el sistema social permita a las mujeres acceder a recursos materiales, políticos, educativos e informativos, ellas no los controlan. Esa identidad atravesada por los estereotipos de género las hace más vulnerables frente a la violencia.
¿Cuando una mujer sufre malos tratos, que se le recomienda?
En las Casas de Orientación de la Mujer y la Familia hay psicólogos y abogados que atienden a todas las mujeres que sienten la necesidad de recibir una ayuda profesional. En todos los servicios de atención primaria de salud hay departamentos de salud mental, que tienen a psiquiatras y psicólogos entrenados para ofrecer esa primera ayuda y un sistema de referencia psicológica. Nosotros tenemos creada una consulta multidisciplinaria conformada por los policías que reciben la denuncia, una fiscal, los médicos que determinan las lesiones para el juicio y nosotros, que nos encargamos de la atención psicológica. Lo primero es trabajar para que la mujer entienda que lo vivido es violencia de género, porque ellas han asumido posiciones de inferioridad respecto a la pareja. No tenemos experiencia por el momento ni en trabajar en grupo con las mujeres ni de trabajar con los maltratadores, pero creemos que sería importante probarlo. Lo que sí que hemos constatado es que de las mujeres a las que atendimos en consulta el año paso, una sola regresó con el esposo. Este éxito no es atribuible sólo a nuestra labor de orientación psicológica, sino también al respaldo de la fiscal, que es la que llama al maltratador y le dice cuáles son los artículos, las disposiciones que dictan lo que le puede pasar si, por ejemplo, vulnera la orden de alejamiento.
¿Cuál es la sentencia habitual en caso de malos tratos físicos y psicológicos?
De 2 a 5 años de prisión y orden de alejamiento.
¿La policía cubana a lo largo del país está formada para dar una buena atención a las mujeres víctimas de violencia?
Nosotros hemos estado capacitando, de forma sistemática, a los instructores policiales para que no revictimicen a la víctima, y recalquen que, aunque se crea que ese problema no va a trascender, hay que registrar esa denuncia, porque lo contrario supone justificar e invisibilizar la violencia. Cuando la mujer se decide a denunciar, los policías tienen la indicación de siempre tomar la acusación y procesarla. Todavía, lamentablemente, las que más acuden son las que han sufrido violencia física.
¿Qué papel juegan las religiones en los discursos y actitudes ante la violencia hacia las mujeres?
Bueno, para mí fue asombroso encontrar que las mujeres que denuncian el maltrato siente apoyo social por parte de la Iglesia, un apoyo que propicia denunciar.
¿Cree que sería conveniente aprobar una ley integral específica para los delitos de violencia de género? [En Cuba el delito de lesiones o de daño psicológico se agrava si hay relación de parentesco, pero no existe una ley expecífica]
No te puedo dar respuesta porque no tengo conocimiento suficiente de cómo se aborda desde el punto de vista legal. Pero sí sé que la ley pone más énfasis cuando se trata de relaciones de pareja.
¿A qué atribuye que en Cuba escaseen los datos oficiales sobre violencia de género y las medidas específicas para combatirla?
Las leyes cubanas cuentan con 19 artículos que protegen a las mujeres de la violencia de pareja promoviendo la equidad entre mujeres y hombres. En todos los anuarios nacionales del país salen reportados los casos de tanto fallecimientos como suicidios, como de intentos suicidas.
Me gustaría asistir a una sesión de eso que llama ‘reevalución cognitiva’. Muy interesante, June.
wow mas de 70% es alucinante, lo que confirma mi teoria de que yo siempre he vivido en las nubes jeeje. Seria interesante ver el nivel de escolarizacion de ese porciento, seguro que lo tenia. Vaya, no me quiero ni imaginar el porciento en ciudades mas pobladas entonces y en la habana donde van a prostituirse ahi si que debe ser gordo.
jaja -si hay que fajarse nos fajamos- es buenisimo es la frase tipica, ahora me suena muy graciosa