Incluso tenemos una cadena de TV que, olvidando los ERE, no dudaba en conectar con el Valle de los Caídos para conocer qué había desayunado Franco.
Por Jesús Salamanca Alonso / Parece mentira que, con la que está cayendo tras la sentencia de los ERE, haya personas próximas a la misma o próximas ideológicamente que se atrevan a hablar de derechos sociales, laborales y/o de salarios justos. Recurren a la Constitución para justificar lo que todos sabemos desde 1978. Lean, lean las cosas que dice el tal Echenique, las barbaridades de Susana Díaz — pero sin entrar en los tejemanejes de “su Moriche”– o la defensa de los derechos laborales que se hace desde el marquesado de Galapagar aunque la práctica es otra cosa bien distinta.
Ya saben aquello de “dime de qué presumes y te diré de qué careces”. No hay más que releer la prensa escrita todos los días. Los otros medios se quedan a mitad de camino en cuanto a datos; eso sí, hay honrosas excepciones, como las hay en los medios sectarios que ocultan las noticias que no les favorecen: incluso tenemos una cadena de TV que, ante un desfalco o un abuso de la izquierda, no dudaba en “conectar con el Valle de los Caídos para conocer qué ha desayunado hoy Franco”. Era una forma recurrente de sembrar desinformación, sectarismo y de malversar la realidad. Sigue leyendo