Tregua de pega.

Los terroristas de ETA, Iziar Moreno y Oier Gómez Mielgo fueron interceptados por los gendarmes franceses en un control policial y huyeron tras disparar a un agente  que resultó herido. Al cabo de una intensa búsqueda,  la policía gala logró detenerles horas después tras un nuevo tiroteo.
El atentado de este sábado no hace sino confirmar que ETA no ha abandonado en ningún momento su actividad criminal. Este sábado se cumplen precisamente tres meses justos desde el último comunicado de la banda terrorista ETA en el que los asesinos anunciaban otro «alto el fuego general, permanente y verificable por la comunidad internacional», pero nada decían de dejar las armas. Y lo han demostrado.

También a esta misma hora, Eusko Alkartasuna y Alternatiba presentaban en San Sebastián su candidatura bajo la marca «Bildu», que incluye a Batasuna,  cantando el «Eusko Gudariak”. Los disparos de este sábado, precipitado por la acción de las fuerzas de seguridad francesas, ha puesto de manifiesto la nula intención de ETA de abandonar el chantaje y los asesinatos. Al parecer Bildu dice que se trata de “un incidente rechazable” pero cree este alto el fuego no incluye el hecho de tirotear a los gendarmes franceses. Está claro que lo único que les importa es poder acceder como sea y con la ayuda de Zapatero a la caja de las instituciones para que los ciudadanos sigan financiando sus atentados.

Y el Gobierno,  con Rubalcaba a la cabeza, sigue mareando la perdiz en su empeño de negociación con la banda terrorista, después de haberse conocido el contenido de las actas de negociación y que “casualmente” no tuvo el detalle de mandar siquiera un representante, no compareció el sábado en Madrid en la enésima manifestación de las víctimas del terrorismo que están preocupados por la actitud de este gobierno que trata mejor a los terroristas probados que a los acusados sin pruebas por violencia doméstica. Y encima una serie de jueces del Supremo afectos al PSOE que ponen reparos a la sentencia dictada para que no se presenten.

Está claro que el PSOE desea vivamente que los terroristas estén en las instituciones vascas, ya nos han dado pruebas con el escaso apoyo a las víctimas a pesar de tener víctimas de sus filas y que consintieron anteriormente que los concejales de ANV estén en los ayuntamientos y solo habrá que ver que  finalmente van a llegar a conseguirlo. Aunque tal como están las cosas por allí, uno se teme lo peor.
Be Sociable, Share!

Comentarios cerrados.