De rodillas

Trinidad Jiménez, esta ministra florero nombrada por Zapatero como ministra de Exteriores para compensarla de su fracaso en Madrid, que lleva a nuestra política exterior por el mundo arrodillándose ante los dictadores de Cuba, Marruecos, Gibraltar o Venezuela, o bien le regala le jamón al de Bolivia que se rompió la pierna dando una patada en sus partes a su rival futbolero, ha tenido otro episodio, esta vez con Irán de Almadineyad.

El pasado lunes, Ignacio Javier Pérez Cambra, un consejero de la Embajada de España en Teherán fue detenido irregularmente por la policía iraní a pesar de su inmunidad diplomática por la policía iraní cuando regresaba a su casa.  El encargado de Asuntos Consulares fue liberado casi cuatro horas y media después, sin que se le imputara ningún tipo de delito.

Trinidad Jiménez dio el plazo de dos días para recibir explicaciones del gobierno iraní plazo que ha expirado, y ella refiriéndose a una pregunta sobre el particular ha dicho que,«hasta el momento no ha habido respuesta». Reconoció que Teherán no se ha dignado a responder a la nota verbal del embajador español. Y dice que sigue esperando por lo que Exteriores aún continúa evaluando la posibilidad de llamar a consultas al embajador español en el país de origen persa, Leopoldo Stampa, ya que el arresto es un «hecho muy grave e inaceptable».

En cambio, Francia ha convocado al embajador iraní en París, Seyed Mahdi Miraboutalebi, en protesta por la detención «inaceptable» del cónsul español, según anunció el Ministerio galo de Exteriores. Que nuestro vecino como cuando Sarkozi liberó a unos secuestrados en Africa, tenga que volver a actuar en un tema tan sencillo y serio como éste, es porque esta inútil no ha tomado aún ninguna iniciativa y está dejando de nuevo a nuestra diplomacia a la altura del betún. Y esto que Irán es socio preferente de Zapatero en esto que él dice la ”Alianza de Civilizaciones”. Juá Y nos quejábamos de Moratinos….

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