Por Xavier Carrió.- Las encuestas de este último fin de semana de SONDEO SIGMA DOS/EL MUNDO revelan que el ca
mbio de ministros en el gobierno de Rodríguez Zapatero apenas ha incidido en cambiar la tendencia de voto del PSOE con respecto al PP si hoy se celebraran elecciones. De esta encuesta se desprende una serie de cuestiones interesantes:
El PP aventaja al PSOE en 12,6 puntos tras la crisis de Gobierno, Rajoy con el PP obtendría el 46,4% de los votos, casi dos puntos más que la mayoría absoluta de Aznar. El PSOE se quedaría en el 33,8%, tres décimas por debajo de Almunia en 2000
Un 54% de votantes del PSOE no quiere a Zapatero de candidato y el rechazo a que se presente de nuevo como candidato sube al 65% entre todos los españoles, y la mayoría cree que ha señalado a Rubalcaba como su sucesor, aunque en este momento actúa como muro de contención para intentar reforzar la resistencia de Zapatero en el poder.
La mayoría duda que la reforma laboral propuesta por el gobierno vaya a solucionar los problemas del paro y la crisis económica. El hecho de mantener en sus puestos a todo el equipo económico con Salgado a la cabeza, manifiesta que el presidente no tiene más ideas al respecto y ha perdido todo interés para estas cuestiones para las que ya se proponen nuevas subidas de impuestos. En este asunto el Gobierno está exclusivamente al pairo de las indicaciones que provengan de Bruselas. Cuanto menos se hable de estos asuntos mejor para el gobierno. El cambio no ha generado ninguna ilusión en su electorado, que lo ve como una simple maniobra de resistencia para neutralizar la subida del PP en las espectativas electorales. Así se ha visto en las útimas intervenciones de este fin de semana de José Blanco y demás dirigentes socialistas donde la mayor parte del tiempo lo han dedicado a desacreditar al PP y a Mariano Rajoy en particular. Zapatero no despeja la duda si se va presentar de nuevo como candidato y mantiene en vilo a sus huestes. Esto genera más dudas a su alrededor, aunque de momento nadie se ha postulado para sustituirle. Así y todo las filas del partido, con apenas uno o dos agujeros, parecen prietas a su alrededor. Cuanto más tiempo resista Zapatero al frente del gobierno, las posibilidades del PSOE en las próximas elecciones autonómicas y municipales disminuirán en proporción inversa al tiempo transcurrido hasta que no se convoquen Elecciones Generales, para enfado de sus dirigentes regionales.
