Por Pedro Vicente.- «Ha llegado julio y sigue sin concretarse el alcance de ese recorte de estructura y organigrama de altos cargos de la Junta que al parecer planeaba Juan Vicente Herrera. Los que creen conocer al presidente atribuyen su indecisión al “factor humano”, esto es, a lo violento que le resulta tener que cesar a nadie, por muchas que sean las causas que lo justifiquen».
«Tengo la impresión de que en este momento ese no es el caso, más que nada porque en las actuales circunstancias ningún cese resultaría traumático. Los potencialmente afectados han tenido tiempo de mentalizarse, a ninguno le pillaría de sorpresa y todos aceptarían con mayor o menor resignación el sacrificio. Dudo además que alguno de los cesados se quedara en la calle, ya que la inmensa mayoría de los cesables son funcionarios y además de alto nivel. No creo por tanto que ese factor atenace al presidente».
«Pienso que la indecisión de Herrera tiene más que ver con los precarios equilibrios internos existentes en el seno de su gobierno, últimamente más fragmentado que nunca».
*FUENTE: El Norte de Castilla.