Martín Alonso: Te felicito porque has logrado lo que siempre quiso la izquierda, te has cargado al PP. Tu inactividad, pasividad, egoísmo, falta de trabajo, sectarismo dentro de tu propio partido ha logrado que el PP sea un partido a la deriva y con una solución que pasa por tu renuncia a un puesto que no te merecías…
FUENTE: España Liberal
Mariano Rajoy Brey, presidente del PP
Todos se han equivocado contigo y no lo vislumbraron hasta que se dieron cuenta de que en las listas a las generales pensaste sólo en ti, jamás en España ni en los problemas de los españoles, te sobraban Rato, Esperanza, Gallardón, Acebes, Zaplana, Cascos…
No pensaste en que tenías que hacer un equipo para ganar y gobernar o al menos un equipo para dar soluciones ante una crisis económica y moral en la que estaba sumida nuestra sociedad.
Te proclamaste presidente en Valencia en un congreso a la “búlgara” con la irresponsabilidad de todos esos líderes que te apoyaron. No querías competencia, te sobraba María San Gil y cualquiera que no te dijese “amén” a todo.
Pues ahí lo tenemos Mariano, estamos perdidos, la sociedad no perdona tu vagancia e inactividad, tu pasividad mientras acaban con tu partido y con tu gente mientras tú te fumas un puro y encima no dices nada.
Lo de Esperanza es una cacería en toda regla, todo un montaje de PRISA que a ti parece venirte muy bien, así eliminas una posible rival, pero no contabas con lo que vendría después, el asunto de Boadilla y el tesorero del PP con despacho debajo del tuyo.
Siento, como muchos ciudadanos, una tremenda rabia al ver lo mal que lo has hecho todo, porque los que lo pagamos somos los ciudadanos que vivimos en la incertidumbre en la que nos ha sumido un gobierno que nos ha llevado a la ruina y una oposición, la tuya que no vale para nada.
Señor Rajoy, le pido que sea honesto y que se vaya, deje a otro que pueda hacer su trabajo mejor, alguien que transmita ilusión, fuerza, poder, frescura, valentía, ánimo, y confianza. Si no lo hace, la única salida acabará siendo la refundación de un partido que usted dilapidó conscientemente.
Martín Alonso
Profesor en la Universidad de Yale – Nueva York.
