Mariano Rajoy y su único apoyo en el Partido Popular, Soraya Sáenz
La mala suerte de Mariano se extiende hasta las vísperas del primer careo con el presidente Rodríguez. No solo llega con el tiempo justo en cuanto a la elección de sus equipos en el partido, sino que ha empezado a llover en el momento en que el agua se había convertido en el primer tema elegido para preguntar a Rodríguez en el Congreso de los diputados.
La inseguridad de Mariano la frente del PP ha generado no pocos problemas en el partido. No solo no se va, sino que prefiere hipotecar al partido antes que reconocer la necesidad de instalarse en segunda fila, clamor popular y de afiliación incluido. Los cientos de cartas que han llegado a Génova, y que se reciben a diario en las sedes provinciales del partido, no parece que le afecten; es más, ha dado orden de llevar al ‘cadalso político’ a cuantos afiliados se dignen cuestionar su liderazgo.
Aciertas al hablar de inseguridad de Rajoy. Ha salido de él alguien que los que confiábamos en él no conocíamos. En vez de examinarse a exterminado… y así ha creado un caldo que se bebe con dificultad. Malos tiempos para el pp. Espero que lo arregle.