Archivo diario: 29 septiembre, 2007

Candongos y siniestros personajes

pepeblanco.JPG ‘Pepiño’ ibarreche.JPG Ibarretxe

Hay gente que no sabe si mata, hiere o espanta cuando habla. Saca la lengua a pasear y lo mismo la deja correr, que pasear o trotar. Acostumbra a jugar con las ideas y las aventan sin sentido una y otra vez. “Flirtear con las ideas cuanto queráis, decía A. Graf; pero en cuanto a casaros con ellas, andad cautos”.

Cualquier persona seria sabe que hay dos personas del ámbito político español que flirtean con las palabras, porque apenas tienen ideas y, las que tienen de Pascuas a Ramos, son pocas y de corto recorrido. No saben qué hacer con ellas. Más bien intentan jugar con las mismas y éstas, a veces, rebotan contra sus editores. Me refiero a la actual vicepresidenta del Gobierno Rodríguez y al siempre risueño, divertido y candongo, ‘Pepiño’ Blanco, don José.

Si algún ciudadano quiere divertirse de verdad no tiene más que escuchar a ‘Maritere’, la vicepresidenta del Gobierno Rodríguez: empezó la legislatura hablando, pero va a acabarla rebuznando. Un claro ejemplo es su desprecio a la oposición y su falta de respeto al prójimo. Nunca se ha visto a un cargo institucional decir que “desprecia” a la oposición ¿Se ha preguntado esta señora — perdón si no lo es — qué piensa de ella la oposición y la ciudadanía? ¿Cuántos españoles apagan la televisión ante el repudio a su persona e imagen? ¿Dónde se ha visto que un personaje público insulte a la ciudadanía? ¿De qué árbol se ha caído esta doña? ¿Acaso se cree la reina de Maputo Imperial?

El sueldo de ‘Maritere’ sale del ciudadano. Por eso no hay que consentirle tantas estupideces los viernes tras el Consejo de Ministros. Cada vez se parece más a su jefe: lo mismo le da mentir, que atropellar dialécticamente o esputar barbaridades. La ‘vicecasitodo’ no quiere ver el ataque a los símbolos patrios y utiliza un vulgar mecanismo de compensación consistente en echar la culpa al primero que pasa por la puerta. Acabará pensando que es el PP quien quema banderas, efigies monárquicas, cajeros automáticos o vehículos.

Alguien debe recordar a ‘Maritere’ que su jefe abrió la caja de los truenos y son ahora los cachorrillos de sus comparsas de Gobierno quienes asaltan los Consistorios para arrancar banderas, quemarlas y aprovechar para insultar y amenazar a decididas y valientes alcaldesas que cantan las verdades a los violentos y a los ladinos y escurridizos socialistas de norteñas tierras. ERC, PNV y ANV son los responsables de crispar la vida nacional, mientras el Gobierno del PSOE ríe sus gracietas desde su propia irresponsabilidad, inutilidad, desprecio y repetida cobardía. Siniestros personajes como ‘Roviretxe’ e Ibarreche se muestran crecidos, una vez comprobado el amilanamiento, pusilanimidad e incompetencia del presidente por accidente.

Casi todos hemos padecido a la ‘vicecasitodo’ del Gobierno más mediocre y descoordinado de la democracia. Se ha pasado gran parte de la legislatura insultando a la ciudadanía, mientras acariciaba al pueblerino nacionalismo, obviaba al independentismo y atizaba a la oposición de los populares; aunque alguna vez con razón, sobre todo cuando el ‘niño’ Acebes acometía sin sentido, rodeado de ignorancia y desinformación. Pese a ello, pocas veces ha demostrado altura de miras doña ‘Maritere’, más dada al trapo y al sapo que a las ideas.

Y como rara vez camina solo un despistado, en este caso despistada, surge de repente con su mal pensada opinión, un atolondrado de la política. El rey de las barbaridades y las estupideces mediáticas: el bachiller ‘Pepiño’. El secretario de organización del PSOE, nombramiento con toda la ‘recoña marinera’ del mundo, echa la culpa a Aznar y al partido de Rajoy del paso dado por Ibarretxe. Ha llegado a decir, sin duda por desinformación e ignorancia, que “el Plan Ibarretxe se gestó cuando Aznar era presidente del Gobierno y se desactivó” al asumir la presidencia el actual presidente por accidente. El bachiller ‘Pepiño’ es peligroso en sus pensamientos, por insulsos y dignos de mofa, y es capaz de negar la pizarra de Suresnes al propio Alfonso Guerra. Aún no le han enseñado a don José que, como bachiller irreverente, tras una estupidez ha de procurar una seria reflexión. Pitágoras hablaba de la importancia de educar a los niños para no tener que castigar a los hombres. Y ‘Pepiño’, con su bachiller a cuestas, merece un castigo democrático por sus extemporáneas y frecuentes estupideces.

'Reyes' de la algarada

Algarada proetarra

 

«Cremem la corona espanyola» («Quememos la corona española»), rezaba la pancarta desplegada en la Universidad de Barcelona, donde – además – se ha quemado otra con un dibujo que presumiblemente representaba al Rey de España. El hecho de que el dibujo careciese de rostro pone de manifiesto el miedo de los radicales a ser encausados. La falta de rostro lleva a una defensa más fácil y, tal y como está el patio, parece que no quieren verse en la misma situación que los dos inculpados con los que se solidarizaban.

El radicalismo independentista es tan poco original que incurre en lo más cutre para hacerse ver y retratarse. A lo largo de la Historia siempre ha habido fotos meritorias y dignas de recuerdo; pero otras como éstas son fruto de la mediocridad, la irracionalidad, la vagancia y la mala fe. Estamos ante un intento de crispar a la sociedad por parte de los ‘reyes del diálogo’.

Esos adolescentes, aficionados a la algarada y reyes del desorden y la provocación, aprenden a ‘dialogar’ con la violencia como bandera. Pero lo han aprendido de sus mayores. Ahí están los miembros del Sindicato de Estudiantes de los Países Catalanes (SEPC). Solo leer el nombre ya invita a la risa, a la mofa y al sarcasmo. ¡Países Catalanes! Ahí es nada, acomplejados y fanáticos coaligados por la misma causa y acompañados por grupos de la siniestra independentista. ¡Vaya chiste de corto recorrido y nula gracia! Se suele decir que siempre el más tonto del pueblo acaba dando que hablar; pues ya lo tenemos aquí, representado en diversos papeles, se llame sindicato de estudiantes catalanes, Ibarreche, Askatasuna, Gobierno vasco o Rodríguez. Tanto da que da lo mismo.

Semejante recorrido tiene la eficacia del Ejecutivo Rodríguez. De aquellos polvos vienen estos lodos. Un Gobierno cuya trayectoria está empañada por todo tipo de sospechas, mentiras y desprecio a la ciudadanía carece de autoridad moral para parar actos como los aludidos. Mientras la cobardía atenaza a los violentos y aprovechan la algarabía y el calor del grupo para resarcirse de sus complejos de inferioridad, el Gobierno mira para otra parte; aunque el presidente se empeñe en decir que nada se hará fuera de la Constitución.

Como eran pocos los problemas que acorralan al Gobierno del presidente Rodríguez, también Ibarreche quiere aprovechar las circunstancias y hacerse la foto antes de que le roben protagonismo. No ha olvidado el desprecio del arco parlamentario español al ‘proyecto Ibarreche’, resultado de una mala digestión y de un peor sueño. Aquel esperpento que supuso la mofa de todos los parlamentarios, ahora pretenden revitalizarlo como nuevo, modélico y contemporáneo. El alejamiento de Josu Jon Imaz de la escena política ha abierto la ventana del colaboracionismo con el independentismo, el ‘radicalismo borroka’ y la permanente contradicción. El PNV, EA y EB se mueven por impulsos del miedo y el sometimiento a los violentos. Son el ejemplo de la fidelidad comprada y, cuando eso es así, siempre es sospechosa y de corta duración.

Pero siguen uniéndose más polichinelas al esperpento nacional. No eran suficientes las barbaridades del Sindicato de Estudiantes de los Países Catalanes (¡Ríanse con toda tranquilidad!), los grupos de la siniestra independentista y el ‘carroñero’ Ibarreche, que ahora surge “Etxerat” y pretende su parte del pastel folclorista. A río revuelto no gana nadie, ni siquiera los pescadores de siempre.

La asociación de familiares de presos de ETA aprovecha cualquier situación para hacerse notar y demostrar que controla a Askatasuna y a Batasuna. El hecho de estar ilegalizada “Etxerat” no parece impedir que se muestren a la luz pública para conseguir un poco de luz publicada. Nadie puede negar que saca ayudas y subvenciones hasta de ‘debajo de las piedras’; pero lo más degradante es que el Gobierno vasco se vuelca con los familiares de presos, corriendo con todos los gastos de las visitas a los distintos centros penitenciarios donde cumplen condena los “hombres de paz” de ETA. Mientras tanto, niega el pan y la sal a las Fundaciones de Víctimas del Terrorismo, regatea ayudas a las mismas y, cuando las concede, el montante económico alcanza la categoría de ‘chocolate del loro’.

Los violentos se consideran ganadores de la calle en Vascongadas y en Navarra. Su ilegalización no les impide pedir cada día el reagrupamiento, la excarcelación y, cuando se tercia, la amnistía de los presos, como si fueran presos políticos. Por lo visto, a fuerza de repetir las cosas, pretenden que se crean. La ignorancia es atrevida y, en este caso, vulgar, mediocre e hipócrita. Cuando dejen de estar presos, dejarán de recibir subvenciones. Por cierto, muchas familias viven exclusivamente de esas subvenciones y de la extorsión de la banda; de ahí que se adopten duras medidas cuando se advierten intentos de deserción.