El Valencia ha vencido al conjunto ruso del Kuban Krasnodar (0-2) en el partido disputado este jueves en el Estadio Kuban, correspondiente a la segunda jornada de la Europa League, donde el conjunto ‘che’ dominó el encuentro pero no pudo resolverlo hasta el tramo final gracias a los goles de Paco Alcácer y Sofiane Feghouli.
El frío ruso y el empuje del público fueron las mayores trabas para el Valencia en su visita al Kuban Krasnodar ruso, y pese a que los españoles dispusieron de las ocasiones y del control del balón, no vio encarrilado el encuentro hasta que Paco Alcácer, que salió desde el banquillo, aprovechase un fallo garrafal del portero Aleksandr Belenov y Feghouli marcase de falta directa para dar los primeros tres puntos de esta Europa League al Valencia.
Los primeros compases del encuentro estuvieron marcados por el dominio del Valencia y por su constante posesión del balón, aunque le costaba crear peligro. Los rusos, por su parte, perdían el cuero constantemente y no conseguían mantenerlo para intentar acercarse a la portería defendida por Vicente Guaita.
La segunda parte empezó más pareja y con el Kuban más lanzado arriba. El Valencia no se encontraba cómodo y se vio algo intimidado en ocasiones con las llegadas de los rusos. Aún así, el fútbol no era muy vistoso en el Estadio Kuban y tanto a rusos como a ‘ches’ les faltaba precisión para finalizar jugadas y poder abrir el marcador.
El encuentro, atascado y con poca creación de juego, parecía decantado a decidirse por un error de alguno de los dos equipos, y así fue como llegó el gol de Paco Alcácer –que había saltado al terreno de juego siete minutos antes– que aprovechó un grave error de Belenov para marcar a puerta vacía y abrir la lata en Krasnodar.
Ocho mintuos después, el argelino Sofiane Feghouli sentenció el encuentro de falta directa que ampliaba la renta del Valencia y allanaba el tramo final del partido para los de Miroslav Djukic, que finalmente obtuvieron los tres puntos e inauguran su casillero de victorias en el grupo A de la Europa League.
TRIUNFO POSTRERO
El Sevilla consiguió la segunda victoria de la fase de grupos en la Europa League tras imponerse al Friburgo (2-0) gracias a los goles del argentino Diego Perotti, de penalti, y de Carlos Bacca, en el tiempo de prologanción, que permite a los nervionenses acercarse a la clasificación para los dieciseisavos de final.
El cuadro de Unai Emery, que adoptó su versión más conservadora, logró los tres puntos en la segunda jornada sin grandes aspavientos. El débil Friburgo, penúltimo clasificado de la Bundesliga, apenas ofreció argumentos en el Pizjuán, pese a que vendiese cara su derrota en el acto inicial.
Los germanos, que aún no han ganado en esta temporada, dieron continuidad a la estadística que respeta al Sevilla al calor de su afición cuando le visita un equipo alemán. Y este jueves no fue menos. Pese a las bajas de Mbia, Cheryshev, Vitolo y Navarro, el cuadro andaluz pudo sobreponerse de manera notable.
Sin embargo, el juego no fue nada vistoso. Emery aún debe encajar las piezas en un equipo que ha cambiado muchos cromos este verano. De hecho, la primera mitad no tuvo dueño y sólo Perotti –a la media hora– pudo haber cambiado el resultado. Poco después, los de Christian Streich dieron algún aviso, pero ninguno de peligro.
Los alemanes, que han vuelto al ‘Viejo Continente’ 12 años después, se deshilacharon en la segunda mitad y ofrecieron los primeros espacios. Ahí apareció Rakitic, el líder de este Sevilla. Fruto de su fútbol se originó el penalti a favor de los locales, a la hora de partido tras un agarrón a Bacca. El argentino Perotti con gran tranquilidad, la misma que dio la expulsión, por doble amarilla, de Diagné.
A partir de ahí se desató el vendaval de los nervionenses, principalmente exacerbado por el nivel de su oponente, completamente roto y sin manera de frenar a su rival en los metros finales. Bacca, después de pegar al larguero, redondeó la victoria tras una asistencia de Jairo, uno de los más destacados del partido.
Sorry, the comment form is closed at this time.