El FC Barcelona Intersport ha caído en la prórroga (29-30) este domingo ante el HSV Hamburgo en la final de la Liga de Campeones de balonmano disputada en el Lanxess Arena de Colonia (Alemania), después de un partido vibrante que no se decidió hasta el último momento y con el que se escapa el noveno título culé en esta competición.
El equipo de Xavi Pascual perdió en un partido muy físico e igualado, en el que se impusieron las defensas. El Barcelona no fue capaz de contrarrestar el acierto alemán en la segunda parte, donde tuvo que remontar hasta cuatro goles para forzar la prórroga. El Hamburgo consiguió su primera Liga de Campeones, después de eliminar a los dos favoritos de la final (THW Kiel y Barça).
El partido comenzó con una sorpresa, el héroe de la semifinal Arpad Sterbik se quedaba en el banquillo de inicio y en su lugar salía Daniel Saric. Una gran defensa azulgrana unida al acierto en la portería del croata daban las primeras ventajas al Barcelona, nunca superiores a los dos tantos.
Los minutos pasaban y los goles llegaban a cuentagotas. Muchas interrupciones y nervios en los dos equipos, que se traducían en acciones al límite del reglamento y cuatro exclusiones antes del descanso. Sólo el azulgrana Rutenka veía puerta con facilidad y los verdaderos protagonistas eran Bitter y Saric, los dos porteros.
En la segunda parte el partido se abrió y llegaron las primeras diferencias importantes. El Barcelona consiguió tres tantos de renta gracias a las buenas transiciones de Víctor Tomás, pero rápidamente el Hamburgo equilibró el marcador. Los alemanes, tras un tiempo muerto, subieron un punto su intensidad defensiva y se adelantaron en el marcador (20-24).
La salida de Sterbik consiguió frenar el caudal germano, que llegó a desbordarse con cuatro goles de diferencia y un gran acierto del alemán Kraus. El Barcelona, ayudado de su paciencia y efectividad, consiguió igualar el partido al término de los 60 minutos reglamentarios e incluso Rutenka pudo dar el título a los suyos con un último lanzamiento a falta de tres segundos.
Ya en la prórroga, las perdidas de balón de los españoles y un Hamburgo más acertado permitieron que el título se quedase en tierras alemanas. Pese a todo el Barcelona tuvo opciones hasta el último segundo. Los de Xavi Pascual se quedaron a las puertas de la gloria.
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