Dic 032012
 

El Real Madrid ha vencido al CAI Zaragoza (94-79) en el partido correspondiente a la décima jornada de la Liga Endesa, gracias a la aportación de Jaycee Caroll (18 puntos) y Rudy Fernández (15 puntos), por lo que continúa invicto, al frente de la clasificación.

Los maños empezaron con fuerza el encuentro, imponiendo un ritmo muy alto secundado por un gran acierto en el tiro. El islandés Jon Stefansson lideró el empuje de los maños con seis puntos en los primeros minutos antes de ser sustituido por el croata Rudez. En el otro lado, el cuadro local partía con el pívot Rafael Hettsheimeir de titular ante el que fuese su equipo, aunque no estuvo acertado.

Carroll mantenía al Real Madrid a una canasta, anotando diez puntos en el primer asalto. Con un abultado 24-26 en el marcador, el base Dontaye Draper aprovechaba sus dos tiros libres a falta de cinco segundos y Llompart, bien defendido por Llull, no conseguía batir a la bocina, que despedía un apasionante primer cuarto. Los madridistas empezaban con buen pie el segundo, logrando un parcial de 6-2 (32-28).

La circulación del balón y las transiciones defensivas de los blancos desgastaban al CAI, con Mirza Begic aportando en defensa y ataque, pero los once puntos de Norel y un triple de Aguilar mantenía a los zaragozanos en el encuentro. Los dos tiros libres de Mirotic colocaban al Madrid con la máxima ventaja del encuentro (42-35) y un espectacular duelo de triples entre Van Rosson y Suárez cerraba la primera parte (47-40).

EL CAI SE QUEDÓ SIN FUERZAS
El tercer cuarto siguió la misma línea que el resto del encuentro y los locales trataron de escaparse en el marcador aumentando la velocidad del ritmo de juego por medio de Llull, llegando a dominar el partido por trece puntos. Pese a ello, el gran trabajo de Norel y Rossom, desde el exterior, mantenía a los rojillos con opciones de cara al último cuarto (66-60).

El pívot holandés del CAI volvió a empezar como un ciclón el último asalto, terminando con 20 puntos y 10 rebotes. El Real Madrid no fallaba porque si no funcionaba la asociación Rodríguez-Fernández, aparecía la muñeca de Carroll para poner al Madrid a diez (74-64). Begic recogía un rebote a tiro libre de Rudy y conseguía colocar la máxima ventaja en el marcador (82-67), coronando un parcial de 16-5.

Lejos de cambiar las cosas, Draper ponía a su equipo a 16 puntos con un triple desde la esquina. Un último triple de Rudez ponía el definitivo 94-79 en el electrónico, y el Real Madrid volvía a mostrarse imbatible rompiendo la racha de cuatro victorias consecutivas de los maños.

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