La selección española de fútbol se medirá este miércoles (20.45 horas/TVE) a su predecesora en el escalón más alto del fútbol mundial, Italia, en un partido amistoso donde los de Vicente del Bosque tendrán que sobrevivir sin tres de sus pilares básicos, Xavi Hernández, Sergio Ramos y Carles Puyol, todos ellos lesionados.
El combinado nacional, que regresa a la actividad con un choque de enjundia, deberá responder a las expectativas cuando el curso todavía no ha echado a rodar. Se trata del primer partido tras la gira por América, que dejó grandes victorias sobre Estados Unidos y Venezuela, allá por el mes de junio.
Lejos quedan las suspicacias y polémicas entre madridistas y culés, que vuelven a componer el grueso del grupo nacional. En esta ocasión, la Supercopa de España es el trasfondo de un partido que sigue siendo valedero para dar continuidad al prestigio y excelencia construidos en los veranos de 2008 y 2010.
Y fue precisamente ante Italia cuando España se despojó de sus complejos. Exactamente un 22 de junio de 2008, la selección, dirigida entonces por Luis Aragonés, superó los cuartos de final en una tanda de penaltis que cambió los papeles de la historia. Ese fue el comienzo de una nueva era. Desde entonces, la ‘Roja’ marca la pauta del concierto internacional.
Al contrario, Italia ha sufrido un proceso inverso. Buena prueba de ello es que jugadores que ya han ofrecido su mejor fútbol a la ‘azzurra’, como Cassano o Pirlo, siguen siendo la referencia en la lista del seleccionador Cesare Prandelli, quien ya ha alabado el juego de la actual campeona del mundo. «La diferencia entre ellos y nosotros es cultural», dijo en la previa.
Pero para seguir en la brecha, Del Bosque deberá recomponer la línea defensiva. Con las ausencias de Puyol y Ramos, el técnico salmantino podría optar por Raúl Albiol para el centro de la zaga y de Arbeloa para el lateral derecho, si no contempla la posibilidad de alinear a Busquets junto a Piqué, pareja de centrales con la que el Barça jugó su último compromiso en Texas.
THIAGO SE HACE MAYOR
Al margen de la defensa, el resto del equipo sólo cambiará en el centro del campo por la baja de Xavi Hernández. Su sutituto podría ser Thiago Alcántara, el jugador del momento. El hispano-brasileño del Barça, centrocampista de moda, ha ofrecido un nivel altísimo en la gira culé al otro lado del charco y ha convencido a Del Bosque.
Thiago, que si debuta este miércoles todavía no impediría la opción de ser convocado por Brasil al tratarse de un amistoso, ya demostró en el Europeo Sub-21 que se trata de un jugador con talento, de estilo nacional, y con sobrada capacidad para tomar el relevo en la medular española.
Al margen del joven jugador blaugrana, España contará nuevamente con Negredo para la punta de ataque, así como con los habituales Torres y Villa, que han destacado en las pretemporadas de sus respectivos equipos. Además, Silva y Cazorla, los más destacados en los últimos partidos con España, también aportarán frescura en los últimos metros.
De esta forma, España afronta una nueva reválida en campo ajeno, con la intención de demostrar al mundo que el fútbol de toque es una fuente inagotable de éxitos, así como un ejemplo a seguir por lo que han confirmado los más pequeños este verano. Italia tratará de impedirlo y lo hará como sabe, de la misma manera que ganaron cuatro Mundiales a lo largo de la historia.
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