Cada cierto tiempo, los diferentes sectores profesionales realizan ferias y congresos, eventos de una gran magnitud y amplio alcance donde distintas empresas dan a conocer sus productos o servicios a los asistentes. Las compañías que deciden participar utilizan este tipo de eventos como una herramienta de marketing con la intención de potenciar su negocio. Al hablar de marketing, es importante seguir una serie de estrategias que permitan obtener el máximo beneficio del acontecimiento.
Antes de tomar la decisión de acudir a un evento, debemos tener claros los objetivos, tanto generales como específicos que queremos conseguir. Después, debemos asegurarnos cuál es el evento al que más nos conviene asistir, es decir, dónde se rentabilizarán más nuestros productos o servicios. Por último, debemos hacer un presupuesto aproximado, ya que el éxito que obtengamos, tanto en ámbito nacional como internacional, dependerá siempre de la inversión que asumamos para la organización.
Las firmas participan con un stand, espacio que identifica a cada empresa y lugar donde se recibe a los visitantes. Antes de la inauguración de la feria, debemos asegurarnos de que el diseño de stands sea el adecuado de cara a lograr los objetivos de marca y notoriedad de la empresa en cuestión. Siempre que el stand sea atractivo, rompedor y tenga un gran impacto visual, conseguirá atrapar la atención de los consumidores interesados y, por tanto, facilitará la obtención de contacto con los asistentes. Cuantos más visitantes se interesen por los productos o servicios que un stand ofrece, más se maximizará el retorno de la inversión previa realizada. Para dar comodidades a la gran afluencia de público posible, el stand debe tener varias zonas diferenciadas: mostrador de atención al cliente; zona amplia de recepción; zona reservada para conversaciones privadas y un almacén para los productos y el material promocional.
Otra de las importantes claves que debemos seguir para triunfar en el evento es escoger una plantilla adecuada que atienda a los concurrentes al congreso. Si conocemos nuestro target, público objetivo, sabremos cómo deben ser las personas que atiendan en el stand, tanto física como personalmente. Además, de esta manera podremos adaptar los mensajes y contenidos del evento a los posibles futuros clientes.
También sería oportuno realizar una amplia campaña publicitaria para motivar los compradores del país sede del evento u otros. Entre las principales actividades que se pueden llevar a cabo, están las siguientes: dirigirse directamente a clientes habituales y potencias para invitarles a acercarse al stand y publicar avisos en los medios de mayor difusión.
Hoy en día, lo más apropiado para difundir un evento es la utilización de las redes sociales, incluyendo hashtags a través de los cuales se pueden seguir todas las publicaciones relacionadas. Esta estrategia de promoción podría conseguir gran repercusión del evento en cuestión y captar la atención de los usuarios. Otra parte fundamental del éxito online es la retransmisión en directo por streaming para que la gente pueda disfrutar de todo lo que sucede y así, sentirse parte del evento. Una vez acabada la feria, es importante mantener las conversaciones en redes el mayor tiempo posible para mejorar nuestro posicionamiento como empresa.
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