A la hora de vender un vehículo usado lo más importante es tasar el coche de forma correcta. De esta forma el vendedor conocerá el precio de mercado de su automóvil para fijar un precio de venta que atraiga a los compradores y satisfaga sus expectativas económicas. Este es el paso más difícil ya que el propietario no siempre tiene la misma concepción que el comprador. Por lo general, a la hora de vender un coche todos solemos sobrevalorarlo, es por eso que se hace imprescindible realizar una comparación de precios con otros similares en el mercado.
Marca, modelo y antigüedad: los básicos
El valor de cualquier coche depende de cuál sea su fabricante y de qué modelo se trate. Igual que no cuesta lo mismo un Dacia que un Audi en un concesionario, en el mercado de segunda mano estas diferencias se mantienen. La antigüedad del automóvil también está relacionada con su fabricante, de hecho hay marcas con mayor depreciación en los primeros años que otras. No obstante, el descuento aplicable a los coches que salieron del concesionario hace menos de un año está entre el 15 y el 20%, que puede aumentar hasta el 50% a partir de su segundo año de vida dependiendo de la casa de fabricación. Es a partir del cuarto cuando esta devaluación empieza a estancarse y a estabilizarse.
El estado es clave
Tampoco nos podemos olvidar del estado en el que se encuentra el vehículo. En este aspecto es importante tanto el aspecto de la carrocería y el chasis, como el de los componentes internos, ya sea el motor u otros elementos clave en su funcionamiento. De hecho, el motor es un factor que se considera importante en la venta, ya que si es de gasolina en vez de diésel, suele ser más difícil encontrar un comprador. Además, si se tiene un seguro a todo riesgo, se puede aprovechar para realizar cualquier tipo de reparación sin que suponga un coste adicional.
El kilometraje es otra de las claves con las que se puede conocer realmente la vida que ha tenido el automóvil y el rendimiento que puede dar en un futuro. No obstante, en los últimos años con los avances tecnológicos para poder retocar el cuentakilómetros, hay que estar muy atento a la veracidad de este factor. Por supuesto, el automóvil deberá haber pasado la ITV y las revisiones pertinentes. Presentarlo limpio, tanto por fuera como por dentro, ayudará a dar una mejor imagen de él.
Sorry, the comment form is closed at this time.