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Desde hace cuatro temporadas, Cuatro emite el show de telerrealidad Pekín Express en el que varias parejas de concursantes deben ir superando etapas con diversos condicionantes, como disponer de un 1 euro al día y no poder pagar ni por alojarse ni por ser transportados en cualquier vehículo. La sed de triunfo y la competitividad han producido que a lo largo de estas ediciones se vivan momentos para el recuerdo y también de tensión, aunque ninguno se ha acercado hasta lo vivido por Mar y Vanesa en la etapa emitida ayer domingo.
Estas dos hermanas de Sevilla protagonizaron un incidente en el que después de unos momentos de tiras y aflojas dialécticos llegaron a las manos, teniendo que intervenir la organización del programa para evitar males mayores. Todo se desencadenó en el transcurso de la octava etapa. En ella, Mar y Vanesa partían con un hándicap tras acabar en última posición la etapa anterior, lo cual acabó jugando un papel fundamental en una riña que afortunadamente no pasó a mayores, aunque dejó consecuencias importantes como el hecho de ser separadas durante unas horas para invitar a la reflexión.
Tras el incidente, la organización del programa tomó cartas en el asunto y decidió sancionar a la pareja con un aviso de expulsión en caso de repetirse dicha conducta y además con la imposibilidad de lograr el amuleto con el que se premia a los ganadores de cada etapa, durante las dos próximas rutas.
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