Jun 062011
 

El ganadero José Ortega Cano permanece ingresado con «pronóstico grave» en la UCI del hospital universitario Virgen Macarena de Sevilla «sin cambios evolutivos». Mientras, algunos compañeros de profesión han defendido al matador a la par que sufren por su futuro.

Según ha informado el último parte médico, el torero continúa con ventilación mecánica y ‘sedoanalgesiado’ desde su ingreso. El diagnóstico sigue siendo «grave sin cambios evolutivos reseñables», por ello, el propio hospital ha explicado que a partir de ahora «sólo emitirá parte médico cuando existan cambios importantes».

A pesar de la gravedad, varios familiares informaron a Europa Press sobre el pequeño avance que había logrado Ortega Cano tras disminuirle la sedación. «Ha empezado a luchar por vivir, hay una evolución, Ortega reacciona, obedece a las órdenes de los médicos moviendo la mano», informaba el sobrino del torero, Paco Ortega Cano.

Junto al torero se encuentran familiares y amigos que visitan el hospital sevillano a diario. Todos y cada uno de ellos desean que el ganadero se recupere lo antes posible, pero también conocen lo difícil que será la realidad.

«Puede que Ortega Cano cometa una locura cuando se entere que ha muerto una persona en el accidente», confiesa su compañero de profesión, Antonio Puerta. Y añade «Esa es la enfermedad más grande».

Además, el también ganadero ha confesado que «José no iba bebido, porque desde que murió Rocío Jurado bebía sus copitas pero lleva un año riguroso con unas pastillas con las que no puede beber».

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