Atrapados en el atasco

Los grandes atascos protagonizan muchas jornadas la actualidad del día en Madrid. Pero también afectan a las grandes ciudades del Área Metropolitana, porque, cuando las entradas a la capital estornudan de buena mañana, todo el tráfico de la Comunidad se constipa, casi hasta la hora del aperitivo. Madrid es una ciudad de servicios, y en consecuencia, sufre toda la presión del tráfico de reparto y distribución, de camiones y furgonetas; a esto hay que añadir, la entrada diaria de vehículos procedentes de otros municipios de la región, cuyos conductores trabajan en la capital; además, Madrid  sufre las consecuencias de su situación geográfica en el centro de España, en el centro de la red radial. Por la capital, especialmente por las vías de circunvalación M-30 y M-40, pasa el tráfico de Norte a Sur y de Este a Oeste del país. La situación no es fácil de resolver, pero tampoco admite una política de brazos caídos, porque iríamos de atasco en atasco, hasta el caos final. Parece que las instituciones empiezan a moverse con el ánimo de paliar el tapón diario: la presidenta regional, Cristina Cifuentes, anuncia la contratación de 360 nuevos conductores para el Metro, para de esta manera aumentar la frecuencia de trenes, y en consecuencia, captar mayor número de viajeros. Por su parte, el Ayuntamiento de Manuel Carmena, anuncia la creación de 8 grandes aparcamientos disuasorios en las entradas a la ciudad, para que el conductor que viene de fuera, pueda dejar su coche y llegar al centro en transporte público. Algo hay que hacer, antes de cerrar Madrid a la circulación.

Be Sociable, Share!