Taxi nostalgia

– ¡María! ¿Me oyes?- Trato de hablar con ella por teléfono mientras me subo a un taxi en marcha.

– Sí, sí, ya estoy yendo para allá. No, no me ha sido posible escaparme antes. Lo sé, lo sé, sé que se muere de la ilusión porque le lleve yo. Vale, cariño, un beso.

El taxista me mira a través del espejo retrovisor con una sonrisa nostálgica.

-Ya ve, le digo, es el primer partido de mi hijo con el equipo del colegio y me está esperando para que le lleve al campo.

-¿Cuántos años tiene?- Me pregunta.

– Siete.

– Siete años-, repite… y no sé muy bien por qué sus labios tiemblan.

– ¿Tiene usted hijos?

– Sí, dos, bueno, uno. Uno se me murió cuando tenía 25 años-. 

– Vaya, lo siento mucho-, le digo mientras apoyo mi mano en su hombro. Sus labios ya no tiemblan pero una lágrima resbala por su mejilla sin que él se preocupe por disimularla. Parece más concentrado en tratar de  retener el rostro de su hijo en la fragil memoria.

– ¿Qué pasó?

– Desde pequeño quería ser bombero pero a mí no me hacía ninguna gracia. Como lo sabía prefirió estudiar antes Ingeniería. Cuando terminó cumplió su sueño y empezó a hacer prácticas en el parque de bomberos de la Sierra. A la semana de empezar su camión cisterna volcó y se despeñó. Murió en el acto.

– ¿Cómo se llamaba?

-Jorge-, me contesta con un susurro entrecortado. Y a mí se me encoge el alma. A partir de ese instante ninguno de los dos habla más, salvo al final del trayecto para despedirnos mientras nos estrechamos las manos.

En la acera me espera María… con mi hijo Jorge… repleto de sueños.

3 comments for “Taxi nostalgia

  1. 31 octubre, 2011 at 22:53

    Taxi nostalgia – http://t.co/8EUat4YU

  2. 2 noviembre, 2011 at 15:02

    Taxi nostalgia http://t.co/eSeYpxrT

  3. 26 noviembre, 2011 at 16:00

    ¡Me ha encantado! @alvarolucas taxi nostalgia – http://t.co/hIIopXJ0

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