Alto y claro, ¡NO SOMOS COMO GRECIA! Por mucho que algunos se empeñen en trasmitir la imagen de caos y desconcierto, ¡NO SOMOS COMO GRECIA! Por mucho que algunos intenten incendiar las calles y sembrar el desorden, ¡NO SOMOS COMO GRECIA! Hay muchas diferencias, muchas, aunque cuatro energúmenos encapuchados con piedras en la mano y/o megáfono en ristre traten de alborotar las manifestaciones de estudiantes, trabajadores o funcionarios.
Quemar contenedores o coches, destrozar el mobiliario urbano o los escaparates de bancos y comercios aprovechando el tumulto de una manifestación no es expresar en libertad y democráticamente un desacuerdo. Tampoco lo es amparar en el Parlamento a quien difunde mensajes a favor de la educación pública sugiriendo que le pongan una bomba lapa a Esperanza Aguirre.
Los que cubren su cara con capucha o palestino para hablar tras un megáfono deberían aprender un poco de historia y comportamiento democrático para saber que esa no es la forma de defender nada que no sea vandalismo. Los amantes de la memoria histórica deberían enseñar a esta gentuza cómo eran las manifestaciones del Partido Comunista en las que, gracias al servicio de seguridad de los propios convocantes de las manifestaciones, no se producía ni un solo altercado.
La calle es de todos, del que se manifiesta y del que no. Todos tenemos derecho a disfrutar de los espacios públicos y a no consentir que los vándalos nos destrocen lo que es nuestro con el pretexto de luchar contra las medidas del Gobierno. ¡NO SOMOS COMO GRECIA!
Publicado el 2 de marzo de 2012 a las 11:15.