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No doy crédito. Cada día alucino más con la estupidez humana. Desde que ayer empecé a ver en Facebook muestras de apoyo a la concejala de Los Yébenes hasta hoy, que la he escuchado, no dejo de alucinar. Resulta que esta señora está pensando dimitir de su cargo público porque alguien HA ROBADO un video personal y privado que ella envía a su marido. Y se lo está planteando porque algún ‘mal nacido’ lo ha hecho público en su pueblo en las redes sociales. Pero lo más sorprendente de todo esto es que nadie hace referencia al hecho del ROBO del video, sólo hablan y escriben del contenido del mismo. ¿Cómo se puede ser tan zafio, tan hipócrita y tan estrecho mental? En un país, España, en el que más de la mitad de las consultas que se hacen en Internet son para visitar páginas de contenido pornográfico y en donde el libro más leído del verano es ‘Cincuenta sombras de Grey’ de contenido erótico, ¿cómo puede nadie juzgar si el contenido del video de esta señora es propio o no de un cargo público? ¡No hombre, no! Que el video es privado, que a quien se lo manda es a su marido, que lo importante y grave es que alguien HA ROBADO de un canal de comunicación el video y lo ha hecho público sin ningún consentimiento.
No lo ha publicado en ninguna red social, no. Así que olvídense del morbo y chascarrillo barato, que lo preocupante no es que las redes sociales no sean seguras, lo preocupante es que no lo son los canales de comunicación que todos utilizamos.
Publicado el 7 de septiembre de 2012 a las 14:30.