Pepinos, Plenos, Bono y plazas de toros
Está claro que por culpa de los alemanes nos vamos a tener que hartar de comer pepinos para que nuestros agricultores no sufran más de lo debido. Vayas por donde vayas sólo hay pepinos. Los regalan desde Madrid hasta el Corte Inglés. Bueno está lo bueno pero tampoco hay que pasarse, a ver si va a resultar que para evitar reclamar las indemnizaciones que nos adeude Alemania o Europa nos vamos a tener que comer nosotros toda la producción de pepinos.
Visto lo visto nuestros concejales y alcaldes tendrán que hacer como uno de nuestros eurodiputados el pasado martes y esgrimir un pepino en la mano durante los Plenos de Constitución de las Corporaciones hoy sábado 11.
Al presidente de las Cortes, José Bono, se le debe de haber indigestado el tan traído y llevado producto hortícola y como consecuencia del malestar estomacal ha decidido paliar la crisis trabajando menos. La ocurrencia de reducir en un día los Plenos de las Cortes no ha sentado nada bien en una sociedad en la que los políticos están peor vistos que un constitucionalista en el ayuntamiento de San Sebastián. Si lo que pretendía era ahorrar costes a las instituciones, podía haber optado por trasladar las sesiones plenarias en las que no se juntan más de veinte diputados a una sala más pequeña. Claro que también podían rebajar el número de representantes por cada provincia.
Está visto que nuestras instalaciones públicas están sobredimensionadas. Otro ejemplo de esto es Arroyo de la Encomienda, en donde hay una plaza de toros cubierta para hacer cualquier cosa menos corridas de toros, que por primera vez este año, se caen del programa de fiestas.
¡Ver para creer!
Publicado el 11 de junio de 2011 a las 09:15.