A lo mejor es que no son tan buenos
Ya sabemos que la final de la Champions no contará con ningún equipo español. No estarán en ella ninguno de los dos mejores equipos del mundo. Ni Barcelona ni Madrid teñirán con sus colores las calles de Munich. Este tampoco será el año de la décima para unos, ni de la quinta para los otros. ¡A lo mejor es que no son tan buenos!
Lo mismo nos está pasando con nuestros gobiernos, que a lo mejor no son tan buenos como nos los habían pintado. Esta semana nos hemos enterado del engaño de Zapatero a Europa con las cuentas y a la vez hemos vivido como el PP comienza a utilizar la verborrea socialista cuando los problemas le acucian. Se ve que los años del PSOE en el Gobierno de España han servido a los populares para aprender a retorcer el lenguaje para no llamar a las cosas por su nombre.
Ahora resulta que la subida de tasas de las matrículas universitarias no va a provocar un aumento en la recaudación, ¡NO! Resulta que lo que va a provocar es un ahorro. Toda la vida pensando que cuando uno cobra más lo que se produce es un aumento de ingresos y, gracias al PP y al ministro de Educación, la cosa ha cambiado, cobrando más se ahorra más. ¡Manda huevos! Que diría su correligionario Federico Trillo.
Lo que les digo, que muchos de los que votaron por el cambio en las pasadas elecciones empiezan a pensar que a lo mejor es que no son tan buenos. Quizá deberían empezar por cambiar la percepción de la realidad en la que nos han metido: habrá que dejar de pensar que el que despide a trabajadores lo hace para reajustar y recortar despilfarros, aceptándolo como positivo, y volver a primar a los que crean empleo.
Publicado el 30 de abril de 2012 a las 13:15.