Desde 2003 hasta 2009 el único 'Grand slam' que se juega sobre hierba tenía un denominador común: Roger Federer siempre estaba entre los finalistas. Sólo Rafa Nadal en 2008 fue capaz de poner en entredicho un dominio que llevaba camino de convertir al tenista suizo en la mayor leyenda del tenis mundial.
Los periódicos españoles han destacado por todo lo alto la victoria del tenista español en Wimbledon y ofrece tanto titulares heróicos como emotivas fotografías relacionadas con el de Manacor. La prensa internacional también le ha dado una gran importancia al triunfo de Nadal.
-Así han informado los periódicos españoles sobre el triunfo de Nadal en Wimbledon...
- La prensa internacional también ha destacado la victoria del tenista español...
Una fantástica pelota cruzada con su 'drive' le dio a Rafa Nadal la victoria en Wimbledon ante el checo Tomas Berdych, al que se impuso en tres sets con una notable claridad (6-3, 7-5, 6-4). El tenista español superó a un gran adversario, que se había cargado con anterioridad a Djokovic y Federer. El de Manacor sacó muy bien y restó de forma excelente el tremendo saque del checo, que se sitúa ahora como número 8 del mundo en la ATP. Nadal maduró el partido con la categoría que le otorga el hecho de ser el número uno del mundo, buscó con acierto el revés de Berdych y desquició al checho con esos golpes ganadores tan suyos y que evitan cualquier atisbo de victoria frente al español de 24 años.
Sumido en una intensa concentración que apenas dejaba espacio para el festival gestual, Nadal ha manifestado una mejora fascinante en su juego durante la presente temporada. Este factor ha sido corroborado con cinco grandes victorias (tres Masters 1000, Roland Garros y Wimbledon), pero éstas aparecen como consecuencia de un salto cualitativo realizado por el de Manacor. Instalado en una sublime fortaleza mental, Nadal y todo su equipo han logrado que el jugador no tire de premisas físicas (fuerza, resistencia, velocidad) como básicas en su tenis. Nadal ha ganado enteros en la faceta técnica configurada por los diferentes golpes determinantes en el tenis (saque, drive, revés, volea) y la experiencia adquirida en la competición se plasma en un mejor desarrollo táctico de los partidos, una mayor capacidad a la hora de aprovechar los puntos débiles de quien tiene enfrente.
Nadal celebró su victoria en el All England Club tirándose al suelo boca arriba, como suele ser habitual. Posteriormente, hizo una divertida voltereta para terminar este buen ejercicio de gimnasia rítmica en acittud eufórica, apretando los dos puños en señal de triunfo. Respetuoso con el rival y agradeciéndole al público todo su apoyo, el tenista español ha hecho historia porque ningún jugador nacional había logrado dos títulos en este Grand Slam y el torneo en hierba más importante del mundo. El pasado año se perdió el campeonato inglés por una lesión, pero en 2008 también logró ganar la final, circunstancia que engrandece la leyenda de Rafa Nadal. Ha sumado 14 victorias consecutivas sobre el verde londinense y 26 encuentros con final feliz de los 28 últimos.
Este Wimbledon ha supuesto para el de Manacor su octavo Grand Slam (cinco Roland Garros, dos Wimbledon y un Open de Australia) y, en una clasificación histórica, se coloca como séptimo jugador que más títulos de esta categoría ha conseguido, igualado con Ivan Lendl, Ken Rosewall, Andre Agassi, Jimmy Connors, Henri Cochet y Fred Perry. Nadal 'sólo' tiene por delante a Bill Tilden (10), Björn Borg, Rod Laver (11), Roy Emerson (12), Pete Sampra (14) y Roger Federer (16).
La autoridad del tenista español tiene un claro reflejo en la clasificación mundial de la ATP. Lidera este ránking con 10.745 puntos y Djokovic está segundo con 6.905. Federer, tercero, tiene 6.885. El US Open, que arranca el 23 de agosto, parece el próximo objetivo grande de Nadal. Todavía no sabe lo que es ganar este torneo, el más importante del mundo si hablamos de superficie dura. Nadie duda de que el de Manacor viajará a Nueva York con posibilidades de victoria. Eso sí, primero toca disfrutar lo conseguido. ¡Vamos Rafa! No detengas el paso.
España atraviesa una grave crisis económica, los ciudadanos afrontan cada día con una gran incertidumbre en sus bolsillos, pero han encontrado una vía de escape y una demostración de cómo el trabajo puede suponer exitosos frutos: el deporte. El pasado fin de semana ha sido uno de los más felices en la historia del deporte español y vuelve a poner de manifiesto el poderío nacional en diversas modalidades deportivas. Fútbol, tenis y motos han certificado dos jornadas inolvidables.
ESPAÑA HACE HISTORIA EN FÚTBOL: SEMIFINALISTA EN SUDÁFRICA (ver noticia)
En primer lugar, España hizo historia el pasado sábado con su clasificación para semifinales en el Mundial de fútbol de Sudáfrica. Jamás había sucedido. Después de haber ganado la Eurocopa en 2008, una Copa del Mundo sería lo máximo para el fútbol español. El miércoles que viene espera Alemania como penúltima piedra hacia el título. Del Holanda-Uruguay saldría el rival en una supuesta final.
NADAL AGRANDA SU LEYENDA EN TENIS: SEGUNDO TÍTULO EN WIMBLEDON (ver noticia)
El tenista español Rafa Nadal ha logrado su segundo título en Wimbledon, el torneo en hierba más importante del mundo, y suma ocho Grand Slam (5 Roland Garros, 2 Wimbledon y 1 Open de Australia). Con esta cifra iguala a históricos del tenis como Jimmy Connors, Ivan Lendl o Andrea Agassi. Su juventud (24 años) y espíritu de superación invitan a pensar que Nadal obtendrá más triunfos. Posee el número del mundo y no parece que nadie vaya a quitárselo en una larga temporada.
LORENZO Y MÁRQUEZ ENCABEZAN EL LIDERAZGO ESPAÑOL EN MOTOS (ver noticia)
Con un año menos que Nadal, Jorge Lorenzo se ha convertido en el sucesor de Valentino Rossi y su gran temporada puede desembocar en el primer título del mallorquín como piloto de MotoGP. Lorenzo ganó su tercera carrera consecutiva en Montmeló, lidera el Mundial y parece poco probable que se lo arrebaten. Además, Elías lidera la general en Moto2 y Marc Márquez, de 17 años, ha hecho historia al lograr cuatro victorias seguidas en un Mundial. El de Cervera encabeza, ahora, el Mundial de 125cc.
Asimismo, las victorias en baloncesto (actuales campeones del mundo, dos títulos de la NBA para Gau Gasol) o en ciclismo (Alberto Contador defiende durante el presente Tour de Francia su triunfo en el 2009) suponen otras fuentes de alegría para el deporte español en un país que sigue todos estos acontecimientos con pasión. En este sentido, la humildad y profesionalidad que transmiten los deportistas españoles se convierten en buenos espejos sociales, además de suponer un gran ejercicio como brillantes embajadores del país por todo el mundo.
Rafa Nadal ha conseguido la victoria frente al escocés Andy Murray y disputará este domingo (15:00 horas, Cuatro) su cuarta final de Wimbledon con la posibilidad de ganar su segundo título en el All England Club. El tenista español ha vencido en tres sets (6-4, 7-6,6-4) tras dos horas y 21 minutos. El checo Tomas Berdych será el rival del español para hacerse con el torneo.
Rafa Nadal atraviesa uno de los mejores momentos de su carrera deportiva. Esta circunstancia, reconocida por el deportista español en las últimas horas, se ha reafirmado en las semifinales de Wimbledon ante el escocés Andy Murray, un gran jugador que contaba con el apoyo de la grada debido a su origen británico.
El de Manacor se hizo con el primer set en 37 minutos. Fue el tiempo que necesitó para subir el 6-4 al marcador. El gran servicio de Murray (logró 15 'aces') y esos puntos en los que Andy se metía dentro en la pista para golpear con mayor fuerza sus golpes propiciaron una intensa segunda manga, que se decidió finalmente en el 'tie break'. Anteriormente, había salvado dos pelotas de ‘break' con 4-3 en contra. Durante la muerte súbita, Nadal realizó una arriesgada subida a la red para colocar el 6-6 y dos puntos más del español posibilitaron el 8-6. Así, Nadal se hacía con el segundo set en 63 minutos.
El número uno del mundo estuvo muy fino con el primer saque (70% de acierto), apenas cometió 13 errores no forzados y tiró de calidad en los momentos más complicados del encuentro. Rápido, inteligente a la hora de mover a su rival y capaz de colocar pelotas imposibles en el campo de Murray, Nadal aparentaba un nivel inferior al habitual durante el tercer set cuando estaba 4-2 en contra. Sin embargo, el tenista de 24 años le dio la vuelta al resultado y se comió moralmente al escocés, agobiado por los aciertos del de Manacor, hasta que se tiró a la hierba de Wimbledon con tras el 6-4.
EL ESPAÑOL ESTÁ A LAS PUERTAS DE SU SEGUNDO TÍTULO EN WIMBLEDON
Ahora, Nadal persigue su segundo triunfo en Wimbledon, después de haber logrado el primero en 2008 frente a Roger Federer. Se encuentra en la cuarta final del prestigioso torneo inglés, uno de los cuatro Grand Slam del circuito (también jugó las del 2006 y 2007). El número uno del mundo es más número uno que nunca. El checo Tomas Berdych, que eliminó a Djokovic en semifinales y a Federer en cuartos de final, ocupa el puesto número 13 en la clasificación de la ATP. Será su rival en la gran final.
El checo Tomas Berdych se ha impuesto al serbio Novak Djokovic y ha alcanzado la final de Wimbledon después de un vibrante encuentro ante el número dos del mundo. El tenista de 24 años ha vencido en tres sets (6-3, 7-6 (9), 6-3) y asegura su entrada en el 'top-ten' al término del torneo.
Semifinalista en Rolland Garros, Berdych atraviesa un gran momento de forma y puede convertirse en el segundo jugador de nacionalidad checa que gane Wimbledon, después de Jan Kodes en 1973. Después de haber dado la sorpresa contra Roger Federer en cuartos de final y conseguir la segunda derrota del suizo en sus ocho años sobre la hierba del All England Club, el jugador checo, actual número 13 en la clasificación de la ATP, sólo tuvo grandes dificultades en el segundo set para llevarse el partido frente a un Djokovic demasiado irregular.
La inexperiencia en este tipos de partidos de encuentros dentro dentro de un Grand Slam (sólo había alcanzado esta ronda una vez por siete de su adversario serbio) no supuso un factor negativo para Berdych, que fue un poco mejor que Djokovic en casi todos los conceptos tenísticos durante 137 minutos. Así, se asegura el puesto número 8 de la ATP, pase lo que pase en la final de Wimbledon. El domingo (15:00 horas, horario español) se medirá a Rafa Nadal o Andy Murray por el título.
Nadal demostró su capacidad camaleónica. Lejos de mantener un estilo uniforme y previsible, Nadal se metió unos metros por detrás de la línea de fondo para 'pescar' todos los misiles de Soderling. Apenas se habían disputado 6 juegos cuando el sueco empezó a darse cuenta de que lo iba a tener muy complicado. Nadal le movía a su antojo de lado a lado e impedía que Soderling pegara a la pelota como se siente más cómodo.
El balear había preparado el partido a la perfección. Lejos de caer en los errores del año pasado o en las equivocaciones de Federer en cuartos de final, Nadal no estaba dispuesto a que Soderling jugara su mejor tenis. La final se redujo a tres sets. El español no ha cedido una sola manga en este Roland Garros, no ha perdido ningún partido en la temporada en tierra batida, no ha caído en ningún set de las cuatro finales jugadas este año... datos abrumadores.
Las estadísticas sirvieron para borrar otra de las dudas habituales en torno al juego de Nadal: el saque. Durante todo el torneo el balear ha mejorado notablemente con su servicio. Ha sido capaz de firmar aces en momentos delicados y si bien no ha llegado a la potencia de jugadores como Melzer o Soderling, ha sabido alternar dirección y altura para poner las cosas muy difíciles.
Nada ha vuelto al número uno y afronta un tramo de la temporada donde no perderá puntos ya que el año pasado estuvo inédito en Queen's y Wimblendon. Tras una campaña sublime en tierra batida, llega el turno de la hierba. Londres se prepara para vibrar con el carácter ganador de Rafa. Nadal ha vuelto.
Publicado el 7 de junio de 2010 a las 18:30.
El eterno suplente
El míster te mira. ¿Vas a salir?, dice. Desde el banquillo, uno también juega su particular partido. Hablas, organizas, gritas, sufres, encestas, tiras a portería, sueltas un revés o cambias de marcha al llegar a la curva más peligrosa del circuito. No eres el protagonista ante las cámaras, pero te sientes vivo porque eres un loco del deporte. El deporte mueve masas y es un gran espejo para el ser humano que busca emociones fuertes y no entiende de límites.