Los Knicks, primera decepción de los play-offs de la NBA
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Por historia y por una plantilla con varios nombres sobresalientes, los New York Knicks estaban llamados a ser uno de los grandes cocos de las eliminatorias por el título de la NBA. Sin embargo, los Boston Celtics han demostrado que en el deporte el juego colectivo suele estar por encima de las individualidades.
Parecería que la serie se ha decantado por la mayor profundidad de plantilla de los Celtics, pero esa teoría se desmonta con un dato: en ninguno de los cuatro partidos de la serie, los jugadores que comenzaron en el banquillo de los Celtics sumaron más puntos que los suplentes de los Knicks.
Las razones de esta decepción estriban sobre todo en la lesión de Chauncey Billups y en la irregular aportación de las otras dos estrellas de los de Mike D'Antoni. El veterano base se quedó fuera de combate tras el primer partido dejando huérfano a su equipo del mando y manejo de los tiempos tan necesarios en esta fase de la temporada.
Peor fue lo de Carmelo y Stoudemire. El ex de los Nuggets rayó a gran nivel en algunas fases de los partidos, pero sus porcentaje de tiro fueron en algunas ocasiones paupérrimos (4 de 16 en tiros de campo en el tercer partido). Por su parte, Stoudemire demostró que tiene carencias serias en la faceta reboteadora y no impuso su ley en la pintura. Mucho trabajo le queda por delante a D'Antoni si quiere que el equipo llegue tan lejos como marcan las expectativas después de varios fichajes de relumbrón.
Publicado el 25 de abril de 2011 a las 17:30.
