Paso adelante de los toreros
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Algo empieza a moverse en el mundo del toro por parte de los profesionales; los mismos que se han dejado llevar por la abulia y el exceso de confianza empiezan a darse cuenta que hay un movimiento que amenaza con tocarles donde más duele, o sea en los bolsillos. Han solicitado un encuentro con la ministra de cultura y otro con el presidente Zapatero, aunque este último se le podrían ahorrar, pues Zapatero no tiene ni palabra mala ni hecho bueno. Zapatero. Les dará un abrazo y les dirá a todo que sí y luego hará todo lo contrario para no desairar a sus amigos de CiU. Lo cierto es que ahora-debería de haberse hecho antes- hay que aprovechar todas las oportunidades que se brindan para blindar la fiesta de los toros: oportunidades a nivel político, a nivel legal y también a nivel publicitario.
A nivel político hay que intentar por todos los medios conseguir que el toreo se considere un bien artístico y cultural, que los toreros tengan la consideración legal de artistas y puedan inscribirse en el Registro de la Propiedad Intelectual que les ofrece la Ley. Esto, a priori, no debería de ser tan complicado pues desde hace varios años los distintos gobiernos, a través del Ministerio de Cultura correspondiente vienen premiando a los toreros que han "destacado en el campo artístico y cultural o hayan prestado notorios servicios en el fomento, desarrollo o difusión del arte y la cultura...". Es decir, es un reconocimiento implícito y explícito de que el toreo es arte y cultura. Y la cultura, evidentemente no se puede prohibir. O sea, que políticamente bastaría con que hubiera voluntad de hacerlo. Me huele mal que de entrada, la ministra haya dicho que esto debería someterse a debate (...con los catalanes?...) cuando el asunto está bastante claro y si como hemos dicho hay voluntad de hacerlo no sería necesario ningún debate. Pero pasar los toros de Interior a Cultura no sería del todo la solución (habría que buscar la forma de que Interior siguiera interviniendo de alguna manera porque en el mundo del toro-como en otros- la golfería está bastante implantada y si se retira totalmente la responsabilidad a Interior sería un mundo abonado para los golfos de turno); salvado este paréntesis, no parece que hubiera mayor dificultad en conseguirlo.
A nivel legal hay que insistir en la inconstuticionalidad de la decisión aprobada por el parlamento catalán. Como no somos técnicos en la materia no vamos a buscar aquí en cuantos puntos se vulnera la Constitución, aunque parece claro que, entre otros, hay un tema de competencias por cuanto las Comunidades autónomas tienen la facultad solamente de regular la celebración de espectáculos taurinos y no el de prohibirlos. En cualquier caso, el logro de lo anterior -reconocimiento cultural-implicaría ya directamente la inconstitucionalidad de la prohibición de los toros en Cataluña. Hay muchos más aspectos que los toreros sabrán valorar pues no en vano cuentan entre otros con el asesoramiento de Joaquin Moeckel, auténtico erudito en la materia.
A nivel publicitario hay que aprovechar también todas las oportunidades para bombardear a favor de la fiesta, campañas de marketing, explicación de lo que es y significa la fiesta de los toros a todos los niveles, etc., es decir, hacer la fiesta comprensible para todos creando un clima de opinión favorable. También aquí hay técnicos verdaderos maestros en el arte de convencer. Nos queda por delante un año y no hay tiempo que perder si queremos que las cosas vuelvan a su ser en Cataluña y que no se desvirtúen en el resto de España.
Publicado el 16 de agosto de 2010 a las 18:15.
