Final de San Isidro: no toristas ni toreristas
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Por fin, ya teníamos ganas, ha concluido el petardo de San Isidro; feria infumable donde las haya, mal concebida desde sus comienzos, se ha desarrollado como no podía ser de otra manera: la ruina ganadera iniciada en Sevilla ha continuado en Madrid y esperemos se pare ahí porque en caso contrario el porvenir no es nada halagüeño. Ni las corridas toristas, ni las toreristas han servido.
Tan solo las de Los Recitales y Palha en su conjunto, pueden salvarse por salvar algo; un Núñez del Cuvillo, un toro de Victorino, otro de Adolfo y pare usted de contar; un bagaje demasiado pobre para la primera feria del mundo. Los carteles, por otra parte han estado pésimamente rematados, más propios de cualquier plaza de tercera que se precie. Los carteles agosteños en Madrid no están peor rematados.
Económicamente habrá sido un éxito para la empresa, pero es aquí donde la Comunidad de Madrid debe de ser exigente y hacer cumplir no sólo la letra de los pliegos sino también el espíritu. Las taquillas habidas en esa feria han sido seguramente lo suficientemente importantes como para exigir a la empresa carteles más rematados.
En el apartado de toreros, fracaso sin paliativos de las figuras en su conjunto; decepción en el Cid, Perera, Juli, Talavante y Manzanares. Tan solo Castella abrió la Puerta Grande y mérito también para Luis Bolívar con una oreja cortada a ley. Daniel Luque apuntó buenas maneras lo mismo que Morenito de Aranda. Inmenso Morante en todo su poder torero y artista. No cabe duda de que está tocado con la varita de los elegidos. Justo su reconocimiento por parte de los distintos jurados como triunfador absoluto de la feria. Su actuación es de las que no se borran de la retina; es de las que con el tiempo se dirá: yo estuve allí. Pero Morante por sí solo no salva una feria desastrosa ya hemos dicho, en cuanto su concepción y su desarrollo.
Injustificable, por mucho que la empresa lo quiera justificar, la ausencia de José Tomás Ahora viene la feria aniversario mejor tratada en cuanto a la composición de los carteles y hecha con espíritu empresarial (petardo en el abono de San Isidro y rematada la aniversario, el que quiera que la compre...), oportunidad de oro para que las figuras antes mencionadas se justifiquen.
Publicado el 3 de junio de 2009 a las 11:45.