ARANDA DE DUERO Y LOS TOROS
Urge una solución. Estamos entrados ya en el mes de julio y aunque algo parece que se mueve habría que aunar esfuerzos y tirar todos en la misma dirección , sin zancadillas, para que la fiesta de los toros, tan arraigada en Aranda pueda celebrarse por fin este año. Sería ya el cuarto año sin toros con el perjuicio económico que esto supone para la ciudad. Hay que dejar al lado intereses políticos y otros más oscuros de plataformas que con el pretexto de que no se puede jugar con el dinero de los ciudadanos, son ellos los que más están jugando y desperdiciando ya que la ausencia de la feria taurina supone para la ciudad la no recaudación de algo más de un millón de euros cada año. Los políticos que mandan ahora, que antes estaban en la oposición y los que están ahora en la oposición y que antes mandaban, tienen la obligación sin excusas de llegar al acuerdo que sea pensando que el objetivo final es que en Aranda de Duero haya feria taurina. Después de las últimas actuaciones en la plaza, parece que esta cumple con la normativa de seguridad que es lo más importante. El ajuste o no al proyecto inicialmente presentado es una cuestión más política y de animadversión personal de plataformas contra el propietario de la plaza. Parece ser que en cumplimiento del PGOU la empresa Toros Ricor ha propuesto una parcela para ubicar el aparcamiento en superficie suficiente para no contravenir el aludido Plan. No hay ninguna excusa ya; el empresario ha sufrido un importante perjuicio económico por la no celebración de la feria taurina, y la ciudad ídem de lo mismo. Los enemigos personales de Toros Ricor pretenden que la solución, absurda por impensable, pase porque el Ayuntamiento intervenga la propia plaza de toros, o esto o nada. Con las actuales conversaciones en curso hay que buscar la fórmula para que sin salir de la legalidad se otorguen los permisos necesarios para que la plaza de toros vuelva a estar en funcionamiento, la ciudad retome su pulso en fiestas con los toros, y el comercio y servicios tengan una importante inyección económica de la que están tan necesitados. Las fiestas de Aranda no son lo mismo sin toros, pues además los carteles siempre han sido interesantes y han propiciado la llegada de numerosos aficionados de fuera de la ciudad. Así es que señores políticos, a trabajar en un acuerdo que será siempre beneficioso para todos y para la propia ciudad. Soluciones tiene que haber, pero sentarse a trabajar con el foco puesto pensando siempre que el objetivo final es la vuelta de la Fiesta a Aranda. Cañaveralejo
Julio ´14
Publicado el 3 de julio de 2014 a las 11:15.