Una sociedad sin barreras
Archivado en: Editorial, día internacional de la discapacidad
Este viernes 3 de diciembre se celebra el Día Internacional de la Discapacidad. Una fecha que probablemente no signifique mucho para la mayoría de nosotros. Pero para 3,8 millones de personas con discapacidad y para sus familias, que en España suman en conjunto un total de 10 millones de personas, es un día de reivindicación de sus derechos, y una llamada de atención al resto de la sociedad para que escuche y atienda sus demandas. A diario nos encontramos con situaciones tan corrientes como subir los peldaños que dan acceso al portal de nuestra casa, cruzar un paso de cebra, tomar un autobús, entrar en un comercio, acceder a un cajero o navegar por Internet. Situaciones cotidianas que para muchas personas con discapacidad están vetadas o suponen la realización de un verdadero esfuerzo. Esta fecha pretende, aunque sólo sea durante un día, llamar la atención de la sociedad hacia el colectivo de las personas con discapacidad y hacer partícipe al resto de ciudadanos de la necesidad de integrarles con normalidad. Pero además, la celebración de este día pretende ayudar a entender las cuestiones relacionadas con la discapacidad desde la óptica de quien tiene una discapacidad física, psíquica o sensorial, identificando sus problemas y garantizando su derecho a participar en una sociedad en la que todos tengan las mismas oportunidades para alcanzar su desarrollo pleno. Una sociedad inclusiva, que cuente con la participación de todos sus miembros. Sigue habiendo dificultades para lograrlo. El acceso normalizado a los recursos educativos, a los transportes públicos; la supresión de barreras arquitectónicas en calles y edificios, el acceso al ocio y a la cultura, a la comunicación y a las nuevas tecnologías de la información...conforman una larga lista de situaciones por resolver. No se puede negar que en la travesía hacia la plena integración se ha avanzado mucho en los últimos años, pero queda un largo camino por delante para derribar la más dificil de las barreras, la de los prejuicios mentales que impiden una total normalización. Poco más se avanzará si seguimos mirando para otro lado cuando se vulneran los derechos de las personas con discapacidad y si no somos capaces de asimilar que su integración en todos los aspectos de la vida política, social, económica y cultural nos concierne a todos por igual. El Día Internacional de la Discapacidad es una oportunidad para reflexionar y trabajar todos en la misma dirección para lograr una sociedad inclusiva y solidaria con todos los que formamos parte de ella.
Publicado el 3 de diciembre de 2010 a las 10:30.