Archivado en: Real Madrid, CD Tenerife, Olympique de Lyon
Vuelvo a intentar rebajar la euforia que hay en torno al Real Madrid. Parece que no se ha aprendido nada respecto al partido de ida de los octavos de final de la Champions ante el Olympique de Lyon. La Liga de Campeones no tiene nada que ver con el campeonato doméstico.
El nivel de la Liga española ha bajado considerablemente en los últimos años. No era nada extraño ver finales de equipos españoles en algunas competiciones (la Champions 99-00) o a equipos modestos como el Alavés o el Málaga llegando lejos en torneos continentales. La Liga tenía tal nivel competitivo que suponía una gran criba antes de llegar a Europa. Ahora, todo queda supeditado al binomio Madrid-Barça. Después, la nada.
Valencia y Atlético lo pasaron mal para superar a Brujas y Galatasaray, dos equipos de nivel medio. Villarreal y Athletic salieron goleados ante el Wolfsburgo y el Anderlecht, pero en la Liga caminan de nuevo a puestos de Europa League. ¿Qué quiero decir con todo esto? muy simple, los números de los madridistas en Liga no aseguran un éxito europeo.
En Tenerife volvieron a apreciarse las virtudes y los defectos de este equipo. Alegría en ataque, (pero eso sí, ante una defensa adelantada y muy blanda) frente a una escasa concentración en defensa. Casillas tuvo que hacer tres o cuatro paradas de mérito en unas ocasiones que ante Lisandro López, Govou, Bastos o Gomis pueden acabar en un disgusto.
Por todo esto, si Pellegrini y los jugadores no han entendido todavía que el Tenerife no es el Lyon, este equipo se dará otro batacazo en Europa. Luego no digáis que no lo avisé.
Publicado el 1 de marzo de 2010 a las 19:30.