Las (extrañas) filias y fobias del Bernabéu (I)
Archivado en: Real Madrid, Benzema
Portaba el brazalete de capitán y en su palmarés lucían numerosos títulos, incluidos algunos de los más importantes en la historia del club, pero cuando el balón se perdía por la línea de fondo de forma irremediable no lo dudó un solo instante. Apretó los dientes y corrió como un loco, aunque en su fuero interno sabía que aquella jugada acabaría inevitablemente en un triste saque de puerta. Nunca lo entendió, pero siempre asimiló que eso, la entrega indiscutible, era la cualidad que siempre le iba a exigir el público que, domingo tras domingo, se congregaba en el Paseo de la Castellana.
Publicado el 4 de octubre de 2013 a las 09:00.