Casillas y Mourinho, a vueltas con el brazalete de capitán
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Hace pocos días saltaba una noticia que amenazaba con agitar todos los cimientos del Real Madrid. Al parecer, José Mourinho estaba dispuesto a quitarle el brazalete de capitán del equipo blanco a Iker Casillas en favor de algún jugador de campo que pueda estar más cerca del árbitro. Sin confirmación al respecto, la rumorología se extendió hasta que el propio Casillas atajó la polémica.
No parecía una idea razonable, sobre todo atendiendo a todo lo que representa Casillas en el club. Es una de las imágenes del equipo a nivel internacional, un referente en la selección española, uno de los pesos pesados del vestuario y sobre todo, uno de los pocos canteranos que juegan con asiduidad en el primer equipo. Conociendo un poco su personalidad seguro que no habría montado un escándalo público por haber perdido el brazalete, pero esta decisión podría haber hecho mella en el grupo más afín a Iker, entre los que están Albiol, Xabi Alonso y Arbeloa.
Además, durante la temporada, Casillas ha ido reconduciendo su actitud hasta convertirse en un digno portador del brazalete. Comenzó el año repartiendo besos y abrazos en el túnel del Camp Nou antes de un partido de tanta entidad como un Barça-Madrid y lo acabó en el mismo escenario cargando contra la bochornosa actuación arbitral de la vuelta de las semifinales de Champions. Con gestos como éste, Casillas demostró que él también defiende los derechos de su club, el principal argumento de Mourinho en sus ataques dialécticos. Por esa labor y por que nadie conoce mejor que él la casa blanca, parece acertado que este absurdo debate sea enterrado para siempre.
Publicado el 7 de julio de 2011 a las 13:30.