Özil, la piedra angular del Real Madrid en la final de Copa
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No parece que el Real Madrid llegue en el mejor momento a la final de Copa del Rey ante el Barça, o tal vez sí. Las críticas por el planteamiento del primer 'Clásico' tienen un tanto enrarecido el ambiente en el que se mueve el club blanco, aunque siguiendo el libro de ruta de Mourinho todo responda a una estrategia del portugués para liberar a sus jugadores de la presión.
Sea como fuere, gran parte de la afición merengue se muestran contrarios a repetir la alineación del partido del Bernabéu, no tanto por el resultado logrado, sino porque eso supondría que tal vez el jugador de mayor calidad de la plantilla viera el partido desde el banquillo. En apenas nueve meses, Mesut Özil se ha ganado el reconocimiento de los seguidores con goles, asistencias y un catálogo propio de cualquier '10' de nivel mundial.
Brilló en el Mundial, pero con Kaká y la esperanza de Canales, la plantilla blanca parecía bien cubierta en esa posición. Cuando todavía no ha acabado la temporada, Özil parece haber convertido en calderilla los 15 millones pagados por él. Es el jugador diferente de la plantilla, cuando Di María y Cristiano aceleran, él tiene la suficiente calidad como para pararse unas décimas de segundo y sacar el mejor pase posible.
Puede que su suplencia del sábado estuviera justificada en la necesidad de reservarle para los partidos tan importantes que esperan al Madrid hasta el final de temporada, o en lo prescindible que eran sus servicios en un equipo que iba a presionar en su propio campo. Da igual. Özil se ha ganado a pulso ser el vértice sobre el que se sostenga todo el ataque madridista. De las botas del germano pueden salir los pases necesarios para montar contragolpes o para desarbolar a una defensa agazapada en su área. Ahora que los Madrid-Barça parecen reducirse a un pulso Messi-Ronaldo, el concurso del alemán se antoja fundamental. Con él en el campo, a priori, el Madrid sólo cambiaría en un jugador respecto al sábado, pero en realidad cambiaría en más, en muchísimo más.
Publicado el 19 de abril de 2011 a las 17:00.
