Abril, mes de pasión y posible penitencia para José Mourinho
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Después de dos temporadas en blanco y soportando cómo al otro lado del puente aéreo el eterno rival no se cansaba de ir a Canaletas, Florentino Pérez puso todas sus esperanzas en un entrenador que ya sabía el camino para destronar al Barcelona. José Mourinho era el exorcista que estaba llamado a acabar con el demonio que aparecía en las peores pesadillas blancas.
Nueve meses después, Mourinho tendrá varios exámenes finales que decidirán la nota de su tarea. Para empezar, el luso deberá preparar a sus jugadores para la cita complicada del sábado día 16. La Liga está casi perdida, pero aunque la final de Copa esté fijada para cuatro días después, la afición del Bernabéu tal vez no perdonaría otro tropiezo ante el eterno rival, sobre todo si el técnico tira el partido de antemano alineando a los suplentes.
Después llegará la final del torneo del KO, una competición en la que si los blancos se midieran a otro equipo parecería un título menor, pero ante el Barça, la Copa vuelve a tener más prestigio. No me queda ninguna duda que el resultado de ese partido va a marcar la hipotética semifinal de Champions League. Todo esto hará que se concentren cuatro 'Clásicos' en apenas 18 días, demasiado poco tiempo como para que Mourinho sólo tenga que utilizar un plan para acabar con el Barça.
Podemos estar ante un momento de los que cambien la dinámica histórica entre ambos clubes y como Florentino hizo ya meses atrás, el madridismo entero se encomienda a un solo hombre: José Mourinho.
Publicado el 7 de abril de 2011 a las 13:30.