Adebayor, Higuaín y el rompecabezas de Mou ante el Sporting
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Durante los últimos días han inundado los diarios numerosas estadísticas que reflejan la tendencia que tiene el Barça a pinchar cuando sus jugadores vienen de disputar partidos con sus respectivas selecciones. Se habla de que el 'virus FIFA' afecta al Barça y seguro que Mourinho se parte de risa cada vez que escucha eso por no echarse a llorar.
Los culés tienen, a priori, un partido complicado en Villarreal, pero no conviene olvidar otro de los numerosos datos que se han publicado esta semana: en tres años nadie ha tenido la pelota más que los de Guardiola en los partidos del Barça. El 'Submarino' es un gran equipo que, sin embargo, se organiza en torno al balón. Sin la posesión (aunque en ese apartado puede notarse la baja de Xavi), el Villarreal es menos temible y si a eso se le añade que el jueves se juega buena parte de sus opciones de levantar un título por primera vez en su historia, la teórica dificultad del partido de El Madrigal se rebaja sensiblemente.
Pero volviendo al partido del Real Madrid, en la cabeza de Jorge Valdano deben resonar con fuerza las palabras que pronunció Mourinho durante la gira veraniega por EEUU. De no haber fichado a Adebayor en enero, el Madrid sólo tendría en estos momentos en su plantilla un delantero disponible: un Gonzalo Higuaín que acaba de volver de su lesión de espalda. Con las bajas del sancionado Xabi Alonso y los lesionados Marcelo, Benzema y Cristiano Ronaldo, Mourinho deberá ingeniárselas para armar un once de garantías. Con el Tottenham a la vuelta de la esquina, apostaría por este once: Casillas, Ramos, Pepe, Carvalho, Arbeloa, Granero, Khedira, Lass, Di María, Özil y Adebayor.
Sin ser una mala alineación, hay motivos de sobra para poder pensar que una jornada que estaba marcada en rojo por los merengues para recortar puntos puede acabar volviéndose en su contra. Se espera un Sporting bien armado atrás, 'mordiendo' en defensa. Ante eso, se hace necesario el criterio de Alonso a la hora de mover el balón y el disparo desde lejos de Cristiano Ronaldo que haga salir a la defensa unos metros de su área y así dejar algún espacio a su espalda. Sin ellos, habrá menos espacios y por tanto menos posibilidades de que jugadores como Di María gocen de opciones de brillar. Pero no hay margen para las excusas. Como dijo Luis Aragonés, las Ligas se ganan o pierden en los últimos diez partidos y como no podía ser de otra manera, el Madrid está ahí, a rebufo del Barça, pero con credenciales sobradas para derrocar al campeón.
Publicado el 1 de abril de 2011 a las 09:00.
