El Real Madrid ya tiene sus dos fichajes del mercado invernal
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Ha bastado que un jugador del 'once de la alegría' (como algunos lo han bautizado) caiga lesionado para que los nombres de posibles fichajes escondan la realidad que vive el Real Madrid. Después de caer humillado ante el Barça y de no convencer a su parroquia ante el Valencia, el equipo blanco parece necesitado de un estímulo que lo haga reaccionar.
Mientras Mourinho sigue defendiendo la teoría del 'equipo en construcción', la afición busca síntomas a los que aferrarse para seguir creyendo que en mayo podrán ir a Cibeles a festejar algún título. Que desbancar al Barça del reinado de la Liga sea una prioridad en lugar de la Champions refleja a las mil maravillas la decadencia en la que ha caído el club en las últimas temporadas. Antes, el torneo de la regularidad era un plato secundario al que no se hacía ascos pero que aparecía en otro orden de preferencia en favor de la Copa de Europa.
Guste o no en el Bernabéu, la etapa dorada que atraviesa el Barcelona ha elevado el nivel de exigencia. Hasta la Copa, antes infravalorada, se ha convertido en un objetivo real junto a la Champions y a la Liga. Ganar las tres competiciones pasa por tener una plantilla de garantías y en ese aspecto, Mourinho tendrá un motivo para la alegría en las próximas semanas.
Ante el Valencia, el técnico luso dejó entrever las líneas maestras de su plan 'B': dos delanteros con mucha movilidad, sin un '9' de referencia y con un centro del campo muy poblado que invite al equipo contrario a adelantar líneas para explotar la velocidad al contragolpe de Özil, Ronaldo y Di María. Pues bien, como si los Reyes Magos hubieran llegado antes de tiempo, Mourinho dispondrá de dos jugadores que encajan perfectamente en ese esquema: Kaká y Gago.
El brasileño puede ser una opción más que interesante para jugar de segundo punta, esa posición en la que mejor rindió en el Milan y que le exime de obligaciones defensivas. Por su parte, Gago tiene la oportunidad de subir un peldaño en su reputación. Arropado por otros dos mediocentros, el argentino puede demostrar al fin que tiene un sitio en este equipo.
No ha hecho falta ir al mercado, ni siquiera sentarse a negociar con algún representante ávido de cerrar el negocio del siglo. Mourinho ya tiene a sus dos 'fichajes' invernales: uno 'Balón de Oro' y el otro internacional por Argentina, ¿qué más se puede pedir?
Publicado el 7 de diciembre de 2010 a las 11:15.
