De punta en blanco. Real Madrid

Llegaron casi al mismo tiempo al primer equipo y ambos dejan el club con un día de diferencia. Raúl y Guti, los dos capitanes de las últimas temporadas, no vestirán más la camiseta madridista. Se abre una nueva etapa en el club de Chamartín.

Ya comenté en una ocasión que, aunque parezca que sus marchas se produzcan de modo similar, no es justo despedirles del mismo modo. Mientras Raúl ha pasado quince años de trayectoria intachable como profesional, Guti ha sido más noticia por sus desmanes hacia los entrenadores y sus faltas disciplinarias que sobre el terreno de juego.

Llevándolo al terreno de los ídolos, los niños han visto en Raúl un jugador que no era el más veloz, ni el más alto, ni siquiera el que mejor regateaba o el que mejor chutaba a portería. Sin embargo, con tan pocos mimbres ha conseguido mantenerse muchos años en la élite a base de tesón y esfuerzo. Que en su curriculum aparecen ciertos lunares como no saber pasar a un segundo plano cuando su rendimiento menguó o querer imponerse siempre en el vestuario (la hipotética negativa ante la llegada de Villa), no deberían salir a colación ahora. Hoy es el momento de la despedida, del agradecimiento por su labor, nunca de los reproches.

En cambio Guti ha sido todo lo contrario. Con un talento natural indiscutible, el '14' ha sido fiel reflejo de lo que pudo ser y nunca fue. Cuando verano tras verano llegaban 'galácticos' al Real Madrid, ante la pregunta de cuál era el jugador que más les había sorprendido, todos citaban sin pestañear a Guti. Incluso en la elección de su destino ha sido un tanto caprichoso. Mientras Raúl se va a una Liga de las más competitivas de Europa, Guti ha apostado por irse a Turquía de la mano de Schuster, uno de los pocos entrenadores que le ha entendido a lo largo de su carrera.

No habrá más récords para Raúl como madridista, ni más debates en torno a la figura de Guti. Desde hoy, que duda cabe, el Real Madrid empieza una nueva etapa. Merecidamente o no, lo que debería hacer cada seguidor blanco es reconocer los buenos momentos que ambos jugadores han dado al club y desearles suerte en su nuevo destino.

Publicado el 26 de julio de 2010 a las 12:00.