De punta en blanco. Real Madrid

Sábado 8 de mayo. 22:50 de la noche. La mayoría de los aficionados madridistas salen del Santiago Bernabéu con una sensación agridulce: su equipo ha goleado al Athletic, pero el Barça se ha metido medio título en el bolsillo. Todos ellos parecían ajenos a lo que estaba sucediendo en el césped: Guti se despedía del estadio donde ha pasado toda su carrera como profesional.

Un canterano, el segundo capitán, que ha pasado toda su trayectoria vistiendo de blanco. Si nadie conociera más datos pensaría en un estadio abarrotado despidiéndole en pie con una atronadora ovación. Pero cuando se pronuncia el nombre de Guti, todos comprenden a la perfección lo acontecido el pasado sábado. Sólo los 'Ultras Sur', ese sector que goza del apoyo de los jugadores, se quedó para despedir al '14'. Un adiós que ilustra a la perfección su carrera: el reconocimiento de unos contra la indeferencia de otros.

Héroe o villano, Guti tiene la virtud de no haber dejado indiferente a nadie. Capaz de desesperar al más acérrimo de sus defensores y de dejar con la boca abierta a su mayor detractor. Ese es Guti, un jugador cuya profesionalidad ha sido puesta muchas veces en entredicho. Esa fue la delgada línea que le ha separado del éxito absoluto, de haber estado en algún torneo de calado con la selección, de haber jugado como titular alguna final de la Champions y tal vez, de haber ganado un 'Balón de Oro', quién sabe. Calidad le sobraba. Como el estudiante con unas condiciones innatas que dejaba todo para el último día, el torrejonero ha sido un rebelde muchas veces sin causa y otras, las menos, con ella.

Por todo esto, la mayoría de la gente se marchó sin despedirse de él el sábado pasado. De la inmensa mayoría, sólo unos pocos le esperaron. Una despedida como toda su carrera, con más nubes que claros. Una historia de lo que pudo haber sido y nunca fue. Como dice una canción de Ariel Rot, "no hay nada más triste que recordar los sueños del pasado, para comprobar que poco se cumplió de lo que habíamos soñado".

Publicado el 13 de mayo de 2010 a las 13:15.