Oda a Vicente Del Bosque
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Bastó un solo tropiezo para que los detractores de Vicente Del Bosque salieran a decir que no era el seleccionador adecuado. Después de muchos años buscando un hombre ecuánime, con experiencia a la hora de gestionar egos y con una apuesta atractiva de juego nos dedicamos a ponerle piedras en el camino.
No salgo en defensa del seleccionador por su pasado blanco, creo que tiene ciertas lagunas como preparador, pero eso ahora no viene al caso. El propósito de este post no es otro que intentar hacer recordar a algunos las largas travesías por el desierto que ha tenido la 'Roja'.
La primera selección que recuerdo es la que fue a Italia '90. Con la 'Quinta del Buitre' como columna vertebral, los octavos de final fueron la meta de un equipo que fue eliminada por Yugoslavia, un equipo MUY SUPERIOR técnicamente. Recalcó lo de 'muy superior' porque demasiadas veces hemos pecado de esto, de falta de humildad, siempre tendemos a subestimar a los rivales y eso hace un flaco favor a este equipo.
Después llegó la España de Clemente (después de un breve y fracasado periplo de Vicente Miera). El de Barakaldo dio con una generación de pocos alardes técnicos, pero de una capacidad mental fuera de lo común. El propio Clemente reconoció que había varios líderes en el vestuario, algo fundamental para jugar citas de la trascendencia de un Mundial. Llegó Italia con un genio como Roberto Baggio y nos eliminó. Cuatro años después caímos por subestimar a la mejor selección africana que se recuerda (oro dos años antes en los JJOO de Atlanta) y por la excesiva presión a la que se sometió al equipo. Ahí surgieron todos los críticos para cobrarse viejas cuentas con el técnico vasco.
A continuación Camacho e Iñaki Sáez ocuparon el banquillo nacional con suerte distintas y en esto llegó Luis Aragonés que parecía ser el seleccionador ideal. Todos confiaban en su experiencia y en su capacidad para ocupar un puesto tan susceptible de crítica. El 'Sabio' dirigió su primer partido oficial en Bosnia con Vicente y Joaquín como titulares, una clara apuesta por el juego de bandas. Después fue cambiando su propuesta, siempre en función de los jugadores disponibles y acabó jugando con los famosos 'jugones' renunciando a priori al juego de las bandas....pero en realidad no. Iniesta y Silva aportaban en la Eurocopa de 2008 todo el peligro partiendo desde cualquier flanco, además, esa apuesta servía para que tanto Villa como Torres cayeran a los costados para aprovechar su desborde y velocidad. Luis aguantó en el puesto a pesar de las críticas y terminó haciendo un equipo campeón, porque la clave de un éxito de esta magnitud es la paciencia y el tiempo. Una selección no es como un club, sólo puede entrenar cinco o seis veces al año y así es difícil encajar todas las piezas.
Toda esta parrafada sirve para llegar a la conclusión de que Del Bosque, como otros seleccionadores, debe buscar su propio estilo y andar su propio camino. Hasta ahora parece seguir el mismo camino de su antecesor en el cargo: ilusión, críticas y...esperemos que éxito.
Los mimbres son excelentes, pero por una vez dejemos de lado al seleccionador que todos llevamos dentro y disfrutemos con este equipo. Los escépticos sólo tienen que mirar a Francia y a Argentina para comprobar que, hoy por hoy, somos la envidia del fútbol mundial.
Publicado el 7 de septiembre de 2009 a las 20:15.