De punta en blanco. Real Madrid

Cuando el Madrid apostó por deshacer el clan holandés Rafael Van der Vaart aparecía en todas las quinielas para abandonar el Santiago Bernabéu. Pero llegó el 31 de agosto y mientras algunos que parecían indiscutibles en los planes de Pellegrini -Robben- abandonaban el club madridista, el ex capitán del Ajax siguió vistiendo de blanco, no sé muy bien si por falta de ofertas interesantes o por petición del entrenador.

Arrancó la Liga pasada de forma espectacular con varios goles, alguno de ellos realmente bellos, pero con el paso de la temporada fue perdiendo protagonismo para terminar siendo un habitual del banquillo con la llegada de Juande Ramos. Ahora tiene una nueva oportunidad. Ya conoce el campeonato español y las altas exigencias de la grada del Bernabéu, por lo que tras un año de adaptación lo más lógico es que sume más al conjunto.

Será difícil que goce de muchos minutos habiendo tanta competencia en el centro del campo con Kaká, Cristiano Ronaldo, Guti o Granero pero sus cualidades se asemejan mucho a las de futbolistas como Pires o Cazorla a los que Pellegrini dotaba de mucha responsabilidad en el Villarreal. No ha encontrado su posición ideal en el campo, en el Hamburgo jugaba como mediapunta, en la selección ha jugado escorado a la banda izquierda y algunos analistas creen que rinde mejor como segundo delantero. En la historia reciente del fútbol se han dado varios casos en los que algunos jugadores que no contaban en un principio para sus técnicos han terminado triunfando (Zamorano con Jorge Valdano en el Real Madrid de la 94-95 o más recientemente Samuel Eto'o en el FC Barcelona). Sea como fuere lo cierto es que Van der Vaart se queda y lo hace para intentar triunfar.

Publicado el 1 de septiembre de 2009 a las 13:15.